De Beyoncé a Eleanor Roosevelt, los 'cuentos para niñas rebeldes' que arrasan
El libro infantil de biografías de mujeres ya ha vendido más de un millón de copias. Sale la segunda parte, donde activistas y científicas comparten páginas con escritoras y cantantes
"Algunos dicen que las historias no pueden cambiar el mundo. Pero nosotras no estamos de acuerdo". Con esta premisa, Francesca Cavallo y Elena Favilli emprendieron una aventura que arrasa en todo el mundo. 'Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes' se ha convertido en un fenómeno social, un libro que ha vendido más de un millón de copias y que ya tiene su versión para visitar museos y hasta su segunda parte.
La fórmula es sencilla: biografías cortas de personajes femeninos sobresalientes, brillantes. Cada cual en su ámbito. Así, podemos leer la historia de Beyoncé, Oprah Winfrey y Madonna, y también la de Eleanor Roosevelt, Mata Hari y Joan Beauchamp Procter, zoóloga.
Los niños no las conocen
Verán que no todos son nombres conocidos. Aunque para una niña -o niño- Sophia Loren y Hedy Lamarr son tan poco famosas como Sojourner Truth (activista) y Safo (poetisa) para la mayoría de mortales. La historia va de otra cosa.
Las autoras hablan de confianza en su trabajo y recuerdan que "la mayoría de las mujeres extraordinarias cuyas historias están en este libro nunca la tuvo". Esa es la clave: "Con independencia de la importancia de sus hallazgos, la audacia de sus aventuras o el alcance de su genio, con frecuencia las subestimaron, olvidaron y hasta borraron de la historia".
Fecha señalada y reivindicativa
Estamos acaso ante el Día Internacional de la Mujer más reivindicativo que se recuerda, momento en el que la editorial Destino publica la segunda parte de esos 'Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes'. Porque esta empresa, que nació como un crowdfunding que llegó a recaudar un millón de dólares, se ha convertido en fenómeno mundial imparable.
"Mientras descansáis la cabeza sobre la almohada tras leer una de estas historias, ya sea al final de un extenuante día de juegos o de una larga jornada laboral, estéis en Ciudad del Cabo o en Aotearoa, debéis saber que os estáis sentando junto al fuego con cientos de miles de rebeldes que, como vosotras, han emprendido una travesía", escriben las autoras.
Nombres propios
Con este libro, niños y adultos pueden aprender con la vida de gente sobresaliente. Como la de Qiu Jin, revolucionaria china que se rebeló contra su destino y se convirtió en referente al pasar de ser una rica heredera obligada a casarse y guardar las formar a romper con todo y luchar por la educación de las niñas en un país gigante. "No me digan que las mujeres no están para ser heroínas", decía Qiu.
No todas las protagonistas tienen un perfil tan marcadamente feminista, incluso al contrario. Muchas son heroínas por saber llevar el día a día con dignidad o por luchar por sus sueños, sin pensar en si eran mujeres o no. Rachel Carson, por ejemplo, zoóloga y autora de 'Primavera silenciosa', considerado uno de los libros de ciencia más importantes de la historia, luchaba por la defensa del medio ambiente. Ese era su sueño y logró dedicarse a él. También por eso aparece en el libro.
"¿Una princesa? ¡¿Qué?!"
Para cambiar el mundo, las autoras consideran que hay que cambiar las pequeñas historias. "Había una vez una princesa... ¿una princesa? ¡¿Qué?! Había una vez niña que quería llegar hasta Marte. Érase una vez una mujer que se convirtió en una de las mejores tenistas del mundo y otra que descubrió cómo se da la metamorfosis de las mariposas".
Con esta sencilla premisa, la de que las niñas pueden soñar con ser lo que quieran, empezó una aventura que arrasa en todo el mundo.
"Algunos dicen que las historias no pueden cambiar el mundo. Pero nosotras no estamos de acuerdo". Con esta premisa, Francesca Cavallo y Elena Favilli emprendieron una aventura que arrasa en todo el mundo. 'Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes' se ha convertido en un fenómeno social, un libro que ha vendido más de un millón de copias y que ya tiene su versión para visitar museos y hasta su segunda parte.