El marqués de la Floresta recula y ahora dice que no insultó a la Reina

Vive Dios que don Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila jamás faltó el honor de Su Majestad y en modo alguno va a pasar a la historia como felón. El marqués de la Floresta y vizconde de Ayala niega “categóricamente” las “expresiones que se le atribuyen” en el libro ‘La Corte de Felipe VI’, por lo que ha escrito a la Casa del Rey –de su puño y letra y, queremos creer, con pluma de ganso– para “aclarar su pensamiento y postura leal y respetuosa hacia sus Personas y hacia la Institución”. Así lo asegura la autoridad competente. Cerramos comillas y aclaramos que las mayúsculas no son nuestras.

Como el lector aficionado a entresijos aristocráticos sin duda recordará, hace menos de dos meses les informábamos de que el honor de Doña Letizia había sido mancillado por el marqués y vizconde, agravio este que denunció don José Luis Sampedro, señor divisero hijodalgo del antiguo e ilustre Solar de Tejada, numerario de la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía, y autor de 'Las joyas de la Familia Real de España' (Planeta) y 'Dinastías de traición' (La Esfera), entre otras obras.

Señalaba el señor Sampedro que el libro que firman los periodistas Daniel Forcada y Alberto Lardiés evidenciaba que el antaño afectuoso Alfonso de Ceballos habíase tornado descortés en grado sumo. Este es el párrafo de marras: “Después de haberla defendido en varios pleitos tuve un enganchón con ella hace dos años en un acto público. Me la presentaron en una cosa de la Marina y estuvo muy amable, hasta que alguien le dijo que yo era marqués. Le cambió el gesto. Se dio media vuelta y se fue. Simplemente porque le dijeron que yo era marqués. A mí realmente me importa un bledo lo que piense de los marqueses. Tonta es ella si juzga a la gente por el título. Ahora bien, lo que me molesta mucho, porque es una falta de profesionalidad, es que se le note (…). En mi vida le vuelvo a dar el 'majestad' ni el 'señora' ni nada”.

Nuestro hijodalgo envió una carta a la Junta denunciando semejante grosería y recibió respuesta: los extractos que les mostramos en el primer párrafo pertenecen a esa misiva, firmada por la directora del gabinete del presidente de la Junta de Castilla y León. En su correspondiente escrito a la Zarzuela –no va adelantarle por la izquierda el marqués en esta lid–, Sampedro vuelve a romper lanza por la Reina y se erige también en paladín de Forcada y Lardiés: “Ni los autores ni los responsables de la editorial del mismo, la Esfera de los Libros, han recibido aún de D. Alfonso Ceballos-Escalera y Gila la menor noticia respecto a desmentidos, matizaciones o cualquier otro tipo de comentario rechazando la atribución de las declaraciones de referencia, pareciendo lógico que así hubiera ocurrido ya ante la gravedad del hecho y la notoriedad que alcanza por su difusión. En su página de Facebook el interesado tampoco ha formulado hasta la fecha mención alguna a este asunto”.

Conclusión: el marqués se la envaina (la espada, recuerde el lector en qué contexto de justa medieval nos movemos) ante la Reina, pero no osa desafiar a los periodistas que recogieron sus desafortunadas palabras. No de momento, al menos.

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