La familia de Rose Hanbury, en plena polémica por su cercanía con el príncipe Guillermo, acusada de robo y expolio histórico en China

El huracán mediático que sacude la vida de la aristócrata británica Rose Hanbury parece no estar dispuesto a parar. A las diversas informaciones que la sitúan como amante del príncipe Guillermo, algo que sus abogados negaron a través de un comunicado, o su implicación en la teoría de la crisis de salud mental de Kate Middleton, se suma ahora la acusación a su familia de expolio.

A través de las redes sociales, y como recogen diversos medios británicos, un nuevo escándalo sacude a los marqueses de Cholmondeley. Rose Hanbury y su marido, David Rocksavage, están siendo señalados por las obras de arte y mobiliario histórico que tienen en su mansión donde viven junto con sus tres hijos.

Así, se han hecho virales varias fotografías de antiguos reportajes a la pareja en el 'Financial Times' y en 'Vanity Fair'. Unas imágenes tomadas en su mansión familiar, Houghton Hall, en la campiña de Norfolk, donde se ven varias piezas artísticas sobre las que sugieren que fueron saqueadas de China.

Diferentes usuarios de X (antes Twitter) se han hecho eco de las numerosas denuncias que están sumando 'likes' en redes sociales chinas como Weibo y Douyin. Allí, se acusa a la abuela política de Rose Hanbury, Sybil Sassoon, de tener en su colección piezas de la dinastía Qing que deberían estar en museos de su país de origen.

La nueva polémica de Rose Hanbury y su marido: los saqueos

"Los Sassoon comenzaron a acumular su riqueza saqueando la China Qing tardía", afirma una publicación de la plataforma china Xiaohongshu. Señalando algunos de los detalles decorativos que se pueden ver en la mansión Houghton Hall, y que deberían devolver. Aunque, por el momento, solo se trata de un rumor más que afecta a la familia de los marqueses de Cholmondeley, ya que no se tiene constancia de ninguna denuncia pública u oficial desde China por el supuesto expolio de alguna obra de arte o mueble histórico.

Lo que sí es cierto es que estas piezas llegaron a la finca familiar de David Rocksavage y su mujer, Rose Hanbury, gracias a la abuela del actual marqués. Sybil Sassoon pertenecía a una importante familia de orígenes judíos e iraquíes con una gran influencia en la Asia del siglo XIX. Un ilustre linaje de aristócratas y famosos del que ya te contamos todos los detalles.

Así, tanto por herencia como por coleccionismo, acumuló una importante colección de arte y antigüedades de China o de la India. De hecho, contaba con muchas más piezas artísticas, pero varias fueron vendidas en 2002 al londinense Victoria and Albert Museum, dedicado a las artes decorativas.

Un patrimonio que ahora internautas chinos vinculan a los expolios y saqueos que sufrió su país a finales del siglo XIX y principios del XX. Especialmente durante la II Guerra del opio. Por ahora, tanto Rose Hanbury como su marido mantienen su ley del silencio, sin querer entrar a desmentir o aclarar los rumores sobre el legado familiar que se encuentra en esta finca que data del siglo XVIII y que pertenece a la familia de David Rocksavage desde entonces.