Marta Luisa de Noruega, tajante y enfadada por las filtraciones sobre su boda, busca al topo entre su entorno

Hace una semana conocíamos nuevos detalles de la boda real de la princesa Marta Luisa de Noruega y Durek Verrett. Era la revista 'Se og Hør' la encargada de dar a conocer pormenores del enlace como la estricta etiqueta requerida para las invitadas, que el día del enlace no podrán vestir ni de blanco, ni de rosa, ni completamente de negro, ni de dorado. Ahora, hemos conocido que la hija de Harald y Sonia está muy enfadada tras la filtración de esta información, y sospecha de alguien de su entorno.

La princesa ha aprovechado un nuevo capítulo de su podcast, Heartsmart Conversations, para mostrarse tajante y enfadada ante este hecho. "Llevo bastantes años en el juego -de la prensa-, así que soy bastante buena detectando quién hace algo así. Realmente me pregunto cuánto obtuvieron por ello: ¿cuánto valgo? Porque quien lo hizo no es mi amigo si 'Se og Hør' es más importante que nuestra amistad", ha asegurado Marta Luisa.

Estas son algunas declaraciones que pueden escucharse en el adelanto que la hermana del príncipe Haakon ha compartido en su cuenta de Instagram. En el post, muchos de sus seguidores le han dado ánimos y han reconocido sentarse apenados por la situación que está viviendo la princesa. Ella misma ha querido dar las gracias a esos mensajes de cariño. "No siempre es tan fácil. Pero he experimentado ese lado de la gente toda mi vida, así que elijo verlo como una elección interesante. Pero de vez en cuando me enfado y me entristezco", ha reconocido la princesa.

La relación entre Marta Luisa y el medio 'Se og Hør' es públicamente mala. La hija de Harald y Sonia no ha tenido problemas en dedicarles comentarios negativos en entrevistas a otros periódicos. El año pasado, por ejemplo, se mostró muy enfadada al ver que habían entrevistado a la madre de su prometido, Durek Verrett, y que esta no hablaba demasiado bien de su hijo.

"Ellos, los de 'Se og Hør', se aprovechan de las personas débiles y les dan dinero para lograr algo que quieren. No les importa si las familias se rompen. Sólo quieren la historia, y es poco ético y bastante impactante”, declaraba Marta Luisa al portal 'VG'. El medio danés 'BT' ha sido uno de los encargados de narrar este enfado de la princesa por las filtraciones de su boda, y ha hablado con su representante para saber si ya ha encontrado al responsable, al topo. De momento, no ha habido respuesta.

Marta Luisa y el chamán Durek Verrett se casarán el próximo verano en la localidad de Geiranger, situada frente al fiordo Geirangerfjord, al oeste de Noruega. Tal como reveló 'Se og Hør', para disgusto de la princesa, el jueves, 20 de agosto, habrá una fiesta 'Meet & Greet' para que los invitados, llegados de todas las partes del mundo, puedan conocerse. Y aquí es donde empiezan las etiquetas y las indicaciones para el vestuario. Para esta cita, los novios han pedido a todos que su atuendo sea "sexy y genial".

Los novios han programado un crucero para los asistentes el viernes, 30 de agosto, justo un día antes de darse el 'sí quiero'. La jornada terminará con un cóctel y una cena preboda en el hotel Union, para los que se pide vestido de baile para ellas y traje para ellos. Se espera que haya música y baile hasta bien entrada la noche.

El sábado pasarán por el altar en una ceremonia en la que, como hemos dicho, las mujeres deberán ir de largo y no vestir de blanco, de rosa, o completamente de negro o dorado. Y para los hombres, será el esmoquin la prenda estrella. A los invitados procedentes de Estados Unidos se les ha pedido que se inspiren en los trajes que vemos cada año en los premios Oscar. A los europeos se les ha puesto como referencia las cenas de gala.

El día de la boda terminará con un gran banquete y fiesta posterior en el hotel Union, pero no será la última cita programada. Antes de despedirse, los invitados podrán disfrutar de un brunch de tres horas, algo que ya se ha convertido en costumbre en muchas bodas de celebs, para después volar a sus respectivos lugares de origen, unos en el continente americano, otros en Noruega y diferentes países europeos.

Aparte de reglas en el vestuario, los novios también han prohibido a sus invitados tomar imágenes en ningún escenario de la celebración. Tal y como Marta Luisa y Durek Verrett han reflejado en la invitación, está prohibido hacer fotos. Algo que, sin duda, huele a exclusiva.