El rey Felipe visita la casa-museo de Mario Vargas Llosa, su primera parada en su viaje a Perú, junto a Morgana, la hija del nobel

El rey Felipe se encuentra en Arequipa, con motivo del Congreso Internacional de la Lengua Española. Pero ha querido hacer un hueco en su agenda para visitar, nada más aterrizar en la ciudad, la casa-museo del escritor Mario Vargas Llosa junto a algunos de sus familiares. La cita se convertía en la primera parada de su viaje a exprés a Perú, donde este miércoles tendrá lugar la inauguración de la importante cumbre lingüística.

La visita coincide con la reapertura de esta casa-museo, punto de interés para todos los que visitan Arequipa y admiran la figura del nobel peruano, fallecido el pasado abril. La residencia es el mismo lugar donde nació Mario Vargas Llosa y ha sido restaurada y transformada en un museo con 17 salas diferentes que narran toda su trayectoria, desde sus primeros años de vida, hasta los últimos, ya convertido en una figura imprescindible de la literatura.

El rey Felipe no dudó en cuadrar su agenda en la ciudad para poder recorrer la casa-museo. Lo hizo, además, acompañado de Morgana, la hija del escritor, y Luis Llosa, primo y a la vez cuñado, ya que es el hermano de Patricia Llosa, viuda del escritor y también su prima. Junto a ellos, representantes de la Real Academia Española y el Instituto Cervantes, como su director Luis García Montero.

Fotografías, vídeos, documentos, manuscritos... Son muchas las piezas a través de las que se puede conocer la vida y el legado del escritor. Y el rey Felipe no perdió detalle durante la visita privada, en la que también pudo conversar con los familiares, responsables últimos de que esta casa-museo haya podido reabrir para mantener viva la memoria de Mario Vargas Llosa.

Tras su fallecimiento, la Casa Real no dudó en trasladar las condolencias a su familia, pero no ha sido hasta ahora cuando el monarca ha podido transmitir a los Vargas Llosa el pésame en persona. Fue Álvaro, hijo del escritor, quien contó a la prensa española que la tanto los Reyes como don Juan Carlos le habían hecho llegar su cariño: “Tuvo la amabilidad de llamarme por teléfono, desde Abu Dabi, además, se lo agradezco mucho; Sus Majestades también, me enviaron una carta muy bonita".

Unas condolencias de la Casa Real que llegaron a la familia Vargas Llosa de forma presencial también, ya que la princesa Leonor se reunió con Patricia, Morgana y Gonzalo en Perú, durante una de las escalas del Juan Sebastián de Elcano en el Pacífico.

La relación entre las dos familias era estrecha y el vínculo entre Mario Vargas Llosa y el rey Juan Carlos iba más allá del interés literario. Una muestra es que el Rey emérito fue invitado de forma personal por el escritor peruano cuando ingresó en la Academia de la Lengua Francesa, encontrándose en el grupo de íntimos que fueron testigos del histórico momento.

Ahora, el Rey Felipe ha podido homenajear la figura de Mario Vargas Llosa de forma personal, asistiendo a la reapertura de esta casa museo con la que se quiere mantener vivo su legado y su recuerdo en la misma ciudad que lo vio nacer. El monarca ha vuelto así a una ciudad que llevaba sin pisar desde hacía años, incluso antes de convertirse en rey. Lo hizo entonces siendo príncipe y junto a doña Letizia, entonces Princesa de Asturias.