El suicidio de su hijo, la última tragedia en la vida de Tina Turner
La casualidad quiso que ella estuviese, justo esta semana, en el defile que la firma de Giorgio Armani ofrecía en la Semana de la Moda de París
"Ha sido declarado muerto en su residencia de Studio City a las 12.38 de hoy". Así anunciaba la oficina forense del condado de Los Ángeles, este martes, la muerte de Craig Raymond Turner, el primer hijo de Tina Turner, a los 59 años. La casualidad quiso que ella estuviese, justo esta semana, en el desfile que la firma de Giorgio Armani ofrecía en la Semana de la Moda de París, cuando ignoraba que se iba a producir la fatal noticia.
El subdirector de la oficina que anunció el fallecimiento aseguró que el motivo era suicidio y que habían encontrado una herida de bala en su cuerpo. Pese a todo, será la autopsia la que revele los verdaderos datos de la muerte y sus circunstancias.
Según han publicado medios como 'The Hollywood Reporter', la vida de Craig era bastante normal. Fruto de la precoz relación de Tina con el saxofonista Raymond Hill, era un agente de bienes raíces en el Valle de San Fernando y pertenecía a la Asociación de Agentes Inmobiliarios de California. La cantante lo tuvo el 29 de agosto de 1958, cuando apenas tenía 19 años y, según confesaba ella misma, no estaba ni mucho menos preparada para la maternidad. El nacimiento de Raymond también se produjo poco antes de su matrimonio con el que sería su gran amor y gran compañero profesional, Ike Turner. Junto a él formaría un dúo inolvidable para el pop de los años 60. El artista tuvo tal amor por el pequeño que lo acabó adoptando como si fuese un hijo propio, dándole su apellido y una vida presumiblemente mejor.
Lo curioso del tema es que no es la primera vez que Tina Turner se enfrenta cara a cara con un suceso trágico. Cuando apenas tenía 14 años ya perdió a su hermana mayor y a su primo cuando ambos conducían un coche en Ripley, Tennessee. Un trágico accidente de circulación sesgó las vidas de ambos. Además de esta muerte, la cantante tuvo que enfrentarse a muchos otros problemas personales. Muchos de ellos tuvieron que ver con su compañero de cama y escenario, Ike Turner. Aunque este aceptó la presencia de su hijo Raymond en casa y lo trató como a un hijo, Tina no logró conciliar un matrimonio feliz junto a él. El cantante la golpeaba día sí y día también hasta tal punto que los cirujanos tuvieron que reconstruirle la nariz, destrozada a causa de las palizas.
Ante todo el mundo, Tina e Ike eran el dúo perfecto, las voces doradas de una América en la que triunfaban las producciones musicales de Phil Spector o los artistas de la Motown. De puertas para adentro, todo era muy distinto. En aquellos momentos difíciles, el pequeño Raymond fue un apoyo importante para su madre, que ahora tendrá que superar su muerte; un trágico suicidio que ha pillado por sorpresa a la sonrisa más rockera de la música estadounidense.
"Ha sido declarado muerto en su residencia de Studio City a las 12.38 de hoy". Así anunciaba la oficina forense del condado de Los Ángeles, este martes, la muerte de Craig Raymond Turner, el primer hijo de Tina Turner, a los 59 años. La casualidad quiso que ella estuviese, justo esta semana, en el desfile que la firma de Giorgio Armani ofrecía en la Semana de la Moda de París, cuando ignoraba que se iba a producir la fatal noticia.