Whitney Houston según su familia: abusos, drogas prematuras y una sexualidad ambigua
Patricia Houston, cuñada de la estrella, impulsa el documental que se estrena el viernes sobre la biografía más privada de la cantante. Empezó en las drogas con apenas 16 años
Hace seis años que se apagó una de las voces mas prodigiosas y controvertidas de la historia reciente. Whitney Houston aparecía muerta en la bañera del Beverly Hilton a la edad de 48 años. Había sufrido un fallo cardíaco a causa del abuso de cocaína. Entonces empezaba la leyenda. Ahora, parece que son los propios familiares los que quieren seguir rentabilizando su figura a través de un documental titulado ‘Whitney’, que se estrena mundialmente el viernes 6 de julio.
El encargado de dirigirlo es el oscarizado Kevin MacDonald, especialista en llevar a la pantalla grande biopics de celebridades y que nos acercará un poco más la figura tergiversada de la estrella. Para ofrecer un trabajo real, ha entrevistado a 70 personas, aunque solo la mitad aparece durante el metraje. Dichos testimonios se intercalan con fragmentos inéditos grabados del día a día de la estrella. Quizás este polémico trabajo no le suene porque el filme fue presentado fuera de concurso en la pasada edición de Cannes, aunque no participaba en la carrera por ningún galardón -a diferencia de ‘Amy’, sobre la cantante británica Amy Winehouse-.
El proyecto ha sido capitaneado por su cuñada, Patricia Houston, a quien no le tiembla la voz cuando reconoce durante las dos horas de duración del filme que la cantante fue víctima de abusos sexuales. La supuesta abusadora habría sido una prima que se habría aprovechado de Houston durante su abandonada infancia. En medio de estos abusos, surge una incógnita que perseguiría a Whitney hasta el día de su muerte: su verdadera orientación sexual. Y un nombre, Robyn Crawford, su mejor amiga, también responsable de la buena imagen de la estrella en los inicios de su carrera.
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Asimismo, se aporta un detalle estremecedor que nos acerca un poco más a entender su muerte: el icono habría empezado a tomar drogas con tan solo 16 años. Suponemos que a raíz de los vaivenes emocionales que vivía de forma constante sumados a la presión que sentía por parte de su madre, quien quería hacer de ella una mina de oro. Al final lo consiguió, pero el peaje para lograrlo fue bastante caro.
Esto afectó directamente a su hija, Bobbi Kristina Brown, quien comenzó a pervertirse incluso antes que su madre cuando se rodeó de un ambiente tóxico propiciado por su progenitora. El malogrado final de la hija tendría lugar en 2015 tras seis angustiosos meses en coma, también causado por las drogas. Pareciera que la lección no fue aprendida por el clan, que caía en el mismo error una y otra vez.
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Con un desarrollo cronológico de la historia, se desmiente una de las creencias en torno a su matrimonio. Bobby Brown no fue el que introdujo los estupefacientes en su vida, sino sus propios hermanos cuando le dieron a probar marihuana. Tras el divorcio de Brown en 2007, la intérprete intentó rehabilitarse, pero los vicios ya habían minado sus ahorros y no tenía dinero para permitirse un ingreso. Una muerte anunciada que el mundo presenció impotente y que no hace sino corroborar la debilidad de alguien a quien el show business corrompió sin piedad.
Hace seis años que se apagó una de las voces mas prodigiosas y controvertidas de la historia reciente. Whitney Houston aparecía muerta en la bañera del Beverly Hilton a la edad de 48 años. Había sufrido un fallo cardíaco a causa del abuso de cocaína. Entonces empezaba la leyenda. Ahora, parece que son los propios familiares los que quieren seguir rentabilizando su figura a través de un documental titulado ‘Whitney’, que se estrena mundialmente el viernes 6 de julio.