Michelle Obama confiesa que "no soportaba" a su marido ni a sus dos hijas "terroristas"

Michelle Obama nunca se ha mordido la lengua a la hora de aportar detalles sobre los aspectos más personales de su relación con el que fuera el hombre más poderoso del mundo. Al igual que en una ocasión confesara en su pódcast que en ocasiones había sentido ganas de "tirar a Barack por la ventana", ahora el expresidente de los Estados Unidos y sus dos hijas han sido objeto de sus confesiones sin tapujos.

La ex primera dama ha revelado que "no soportaba" a su marido cuando sus hijas eran pequeñas, además de calificar de "terroristas" a Sasha y Malia. Michelle afirmó además que la pareja tuvo problemas porque ambos intentaban "avanzar en sus carreras".

Estas afirmaciones las pronunció mientras promocionaba su nuevo libro, 'The Light We Carry', durante una entrevista con el medio 'Revolt'. "La gente piensa que soy maliciosa por decir esto: es como si hubiera habido diez años en los que no soportaba a mi marido. ¿Y sabes cuándo ocurrió? Cuando las niñas eran pequeñas", expresó.

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"Durante diez años, mientras intentábamos construir nuestras carreras y nos preocupábamos por la escuela y quién hacía qué, yo estaba como 'argh, aquí no hay igualdad'. Porque el matrimonio nunca es 50/50, nunca. Nunca. Hay veces que yo tengo 70, él tiene 30. Hay veces que él tiene 60 o 40. Hemos estado casados 30 años. Pero me quedo con diez años malos antes que 30. Porque la gente se rinde antes", aseguró Michelle Obama.

Malia, de 24 años, y Sasha, de 21, que ahora se han trasladado a la Costa Oeste para estudiar, tenían diez y siete años cuando su familia se mudó a la Casa Blanca, tras varios años de campaña electoral. Hablando sobre ellas las describió como "terroristas" cuando eran pequeñas, diciendo que "tenían sus exigencias". En este sentido, y aplicándolo a todos los niños en general, aseguró que "no hablan, no se comunican bien, lloran todo el tiempo, son irracionales y están necesitados. Y tú los quieres. No puedes culparlos, ¿verdad? Así que vuelcas esa ira en el otro".

En otro momento de la entrevista, la ex primera dama se refirió a tener una amiga del colegio de sus hijos que era negra. "La primera amiga que tuve fue una madre negra. Estábamos en un colegio predominantemente blanco y yo le dije a Sasha: 'Olivia y tú vais a ser amigas porque es una niña negra' y ni siquiera se caían bien. Yo quería conocer a su madre porque quería vivir la experiencia de una madre negra", contó.

Barack y Michelle se conocieron en un bufete de abogados de Chicago en 1989 y, a pesar de sus diferencias, ella siempre deja claro que nunca ha dejado de respetar a su marido: "Puedes estar enfadada con él, pero le miras y sabes que sigue siendo una persona amable e inteligente".