La fuente de la juventud está al alcance de su mano

Había una vez en que la gente envejecía y se le notaba. Gracias a los dermatólogos y cirujanos plásticos, cuya principal misión es atacar los signos de la edad, las generaciones futuras, al menos las que lo puedan pagar, quizá nunca tengan que vivir con papadas ni bolsas en los párpados. Sin embargo, la guerra contra los signos que aparecen en las manos envejecidas es relativamente reciente, y podría ser más difícil que la lucha contra las arrugas del rostro. La piel de las manos por lo general es más delgada que la piel del rostro. Tiene la consistencia de un párpado y es más sensible a las inclemencias del tiempo.

Cuenta Anna Jane Grossman en el diario estadounidense The New York Times que para algunas personas, las batallas son nocturnas, con guantes humectantes y gruesas capas de cremas para las manos con formulas especiales, un sector dedicado al cuidado de la piel que ha crecido más de 60% a nivel global en los últimos cuatro años. Muchas personas recurren a opciones que sólo se pueden conseguir en los consultorios de los doctores: rellenos y otras inyecciones, además de láser para borrar arrugas.

"El movimiento anti-edad se ha vuelto enormemente popular y la gente está comenzando a centrarse en partes de su cuerpo más allá del rostro", afirma el doctor David Colbert, dermatólogo de Manhattan quien ha trabajado en la manos, entre otros, de Dara Tomanovich, la cara y manos de la línea de cuidados para la piel de Olay, Regenerist. En los últimos dos años, indicó el doctor Robert Weiss, dermatólogo de Baltimore, la Sociedad Dermatológica de Estados Unidos le ha estado ofreciendo a sus miembros una variedad de sesiones de información relacionadas con el cuidado de las manos. "Nunca antes lo habíamos hecho, pero ahora la demanda es enorme". En Washington, los procedimientos para mejorar la apariencia de las manos se han vuelto cada vez más populares entre políticos y cabilderos, dijo la doctora Elizabeth Tanzi, dermatóloga del Instituto de Cirugía Láser Dermatológica de Washington. "Una apariencia juvenil les ayuda a ganarse a sus audiencias e implica ciertas ventajas".

Una de las señales más visibles de envejecimiento de las manos es la pérdida de volumen, lo que hace que las manos se vean huesudas y venosas. Weiss a menudo utiliza la escleroterapia, un tratamiento en el que se inyecta en las venas una solución para contraerlas. Algunos doctores inyectan en las manos algunos rellenos como Restylane para añadirles volumen y hacer que las venas y los tendones sean menos visibles. Por lo general se requiere de una sola visita y los resultados duran hasta un año. Otros métodos incluyen las inyecciones de grasa del propio paciente, cuyos resultados duran hasta 10 años.

Y para las manchas en las manos lo más recomendable es el láser, que estimula la generación de colágeno y elimina de manera muy eficiente la descoloración y las arrugas. Otros tratamientos incluyen la aplicación regular de productos naturales como aceites de aguacate y omega-3, así como las famosas gotas de limón en las puntas de los dedos para mantenerlos blancos.