Belén Cuesta: "Quizá he utilizado más el cerebro que el corazón"

Belén Cuesta (40) es una mujer tímida, o por lo menos eso parece cuando se planta frente a cien mujeres como embajadora de una firma de belleza como ha hecho hace pocos días en Madrid.

Pese a que la escena es su hábitat natural, muestra respeto cuando habla delante de una audiencia de nada más y nada menos que epigenética con uno de los responsables de la Fundación Carreras. Se muestra preocupada por si manda más la genética o el hábito, qué pasa con los gemelos que envejecen de formas diferentes...

Le hace diversas preguntas al experto desde el más absoluto interés, porque como cuenta ella, hace poco ha descubierto que tan solo el 10% de nuestra piel está en manos de la genética, el 90% de su estado depende de nuestras rutinas y de lo que hagamos con ella y ahpra se cuida con el nuevo Hyaluron Filler de Eucerin. De piel y belleza hablamos con la actriz del momento

TE PUEDE INTERESAR

El dominio de Belén Cuesta de la elegancia minimalista

María Aguirre

Participaste en Balenciaga, tocando la moda, ahora eres imagen de una marca de belleza… ¿Imaginabas este momento?

Me da pudor. Lo que me pasa es que yo soy consciente de que mi trabajo es otro, pero es verdad que es un placer que buenas marcas y confíen en ti. Yo me he sentido en ese sentido halagada entre comillas, y más una firma de belleza como esta que tiene un fin más de cuidado dermatológico. Un producto que apuesta por la salud de la piel, por una belleza natural, no solo un tema estético.

¿Cómo te cuidas?

Me cuido cuando y cómo puedo. Tengo la piel sensible desde pequeña, muy reactiva. Siempre he acudido a la farmacia para cuidarla, me he lavado la piel del rostro con agua y jabón. O sea, no suelo usar ni toallitas ni cosas de esas, pero porque mi piel sufre. Me desmaquillo siempre no por un tema de quitarme los productos, sino porque me gusta sentirme limpia y cómoda, igual que llegas a casa y te pones ropa confortable.

Dejé de fumar hace tiempo. Ahora tengo más difícil hacer deporte, aunque practico yoga y pilates y hay épocas que tengo un entrenador. Además, como sanísimo.

¿Cambias tus rutinas con los rodajes?

No es fácil, depende, porque hay proyectos que son de repente muy demandante. Y se rueda muchísimas horas y horarios como muy difíciles y ahí se resiente todo.

¿Cómo se presenta este próximo año a nivel laboral?

Bien, empiezo ahora, un rodaje del que no me dejan hablar todavía, pero empiezo ya. O sea que tengo trabajo, estoy contenta.

¿Qué ha cambiado en Belén en los últimos años?

Pues yo pienso que muy poco. Luego veo fotos y digo que he cambiado. No sé, me siento un poco igual, igual, más cansada, a lo mejor, pero veo que en esencia sigo siendo bastante igual. Me siento como si el tiempo no hubiera pasado, mi edad real de la que creo que tengo distan ocho años.

Si pudieras darle un consejo a la Belén de los inicios, ¿cuál sería?

Quizá un poco de esa cosa, de sentir más, de confiar más en la intuición, en ocasiones debería haberle hecho más caso. Utilicé más el cerebro, que el corazón. Pero bueno, luego tampoco me diría muchas cosas porque volvería a repetirlo todo tal y cómo me ha sucedido.

TE PUEDE INTERESAR

De Mariló Montero a Belén Cuesta: nueva jornada de la MBFW con multitud de famosas

R. R.

¿Con qué te quedas de los papeles que has interpretado a lo largo de estos años?

Por mencionar algunos... de 'La trinchera infinita' con los directores, que son increíbles. Me encantó hacer el personaje de Bárbara Rey, para mí fue muy importante. En 'El Cuco', con haber hecho mi primera peli de terror, que también aprendí mucho. En 'Ahora vuelvo', el reencuentro con Gabi, el director, que hacía mucho que no trabajaba. 'Romancero', con Fernando Navarro, que es el guionista y que me encanta lo que escribe. Formar parte de la historia de Balenciaga con Alberto San Juan es una maravilla. En 'Las largas sombras' di con un elenco de mujeres maravilloso, con Elena Anaya, Irene, Marta, Itziar... Y 'La llamada' y 'Paquita Salas' han sido los proyectos de mi vida.

Con estos proyectos te has convertido en una actriz de referencia y una de las favoritas del público. Además, una reina de los gifs virales por Maui, tu papel en 'Paquita Salas'. ¿Cómo sienta este fenómeno?

A mí eso me parece una suerte, que de repente la gente se quede con un personaje tuyo. Me siento muy afortunada. Y como yo encima a Paquita y Maui, su personaje, les tengo tantísimo cariño, pues me parece una maravilla.