El dos piezas de Oysho con el que serás la invitada perfecta

En un momento en el que Beyoncé nos sorprende con su look más africano, reinterpretando a Nala en la próxima adaptación de 'El Rey León', encontramos en Oysho este conjunto con reminiscencias al continente vecino, del que nos separan 14 kilómetros y del que la marca extrae la inspiración para su estampado, y os prometemos que os va a convencer para utilizarlo en la próxima boda a la que tengáis que acudir de invitadas

El estampado tropical, con sus hojas y flores habituales, se manifiesta en multitud de piezas veraniegas y sin embargo este conjunto se aleja, y lo hace con mucho estilo, de este estampado, del que recoge el motivo floral y lo adapta a unos colores que nos recuerdan mucho más a las telas típicamente africanas que a las playas de Hawái.

Este dos piezas, un look de pantalón y top, tiene una fuerza combinado en conjunto que, aunque ambas prendas tienen personalidad para usarse por separado, es utilizadas juntas cuando nos cautiva por completo.

Además el estilo global bebe también inspiración asiática. Vaya, que Oysho se ha marcado un estilazo de matrícula de honor, pero vayamos por partes.

El top, de escote profundo de pico, mantiene la elegancia con unos tirantes que se convierten en mangas cortas muy favorecedoras para los brazos y que permite utilizar sujetador con este look, aún a pesar de los grandes escotes frontal y trasero que crea. Es precisamente este corte de top el que nos recuerda a prendas de estilo asiático como los kimonos. Con ese cruce de tela tan original se nos dibuja en la mente un chaqueta de karate cuyo cinturón sería la parte final de este magnífico top.

Por otro lado, el pantalón mantiene un corte de lo más favorecedor, ya que ajusta a la cintura y desde ahí cae sin ajustarse. No llega a ser un corte palazzo, pero está claro que se adapta a las tendencias actueales de perneras anchas.

Esto es genial para aquellas mujeres que tienen caderas anchas pero cintura más estrecha, porque verán potenciados sus puntos fuertes, mientras que el resto se desdibuja en un mar traído de la sabana.

Cada pieza podría ser combinada por separado con prendas blancas como unos jeans el primero o un top o blusa en otro color neutral, que no reste protagonismo a la prenda principal.

Sin embargo, como ya hemos dicho, es combinado en conjunto cuando cobra verdadera importancia, lo que se traduce en un look de invitada perfecto.

Si lo combinamos con unas sandalias negras de tacón vertiginoso o incluso con una sandalia de tacón ancho de metacrilato y un clutch, tendremos un look precioso que, a falta de algunos detalles como un impresionante anillo o un peinado recogido pero informal, nos hará lucir con luz propia. Esa que tenemos y que solo conjuntos como este hacen sacar a la luz.