María de León, comunicadora y aristócrata: "He perdido contratos por ser de una familia determinada"

Maria de León Castillejo tiene en su árbol genealógico a Rafael de León y a la condesa de Lebrija, que restauró el palacio que lleva su nombre y de la que heredó el espíritu aventurero y creativo. Se licenció en Ciencias Ambientales y acabó su currículum académico dedicándose a estudiar Humanidades. Ella misma asegura que es difícil definir su historial laboral, sobre todo porque no le gusta que la etiqueten. Su apariencia de princesa de cuento le ha cerrado algunas puertas y en cambio su espíritu creativo y emprendedor le ha abierto otras muchas. Acaba de publicar su segundo libro, 'Vivir con sentido' (Roca Editorial). Una obra que define como un ensayo donde se encuentran sus vivencias, testimonios personales y profesionales que quiere que dejen huella a los lectores. En esta entrevista cuenta cómo es su vida y la travesía del desierto que a veces ha tenido que hacer.

PREGUNTA. ¿Cómo quieres que se te conozca? Escritora, influencer, aventurera, coach...? Es complicado colocarte en un apartado profesional.

RESPUESTA. La verdad es que dicho así resulta muy difícil. El problema de las etiquetas es que hay que buscar una palabra. Yo soy una persona buscadora y emprendedora y por lo tanto encajonarme en un apartado no es posible. Y se te ha olvidado el de comunicadora.

P. Acabas de publicar tu segundo libro. Del primero, 'Vestir con estilo', se hicieron cuatro ediciones. ¿Cómo se te ocurrió 'Vivir con sentido'?

R. La idea es que deje una huella en la gente que lo lea. Que les aporte. No es un libro de autoayuda sino un ensayo con mis testimonios y vivencias que he querido compartir. El aprendizaje es difícil y creo que la teoría sin la práctica no es nada.

P. Al leerlo parece que tu vida ha sido muy fácil.

R. Pues no. ¿Sabes cuál es el problema? Que nos quedamos siempre con la imagen y puede resultar una cruz. A mí muchas veces me etiquetan por el lugar donde he nacido, quien es mi familia y me parece muy injusto. Todas las personas atravesamos momentos de crisis, de sombras, de oscuridad, de sufrimiento. He tratado de buscar alternativas a esos momentos.

"He perdido a mucha gente querida que me ha dejado mucha huella. Me casé y me separé muy rápido. Son frustraciones que van llenando la mochila"

P. Esas situaciones duras no las has transmitido, al menos públicamente.

R. Soy y seré siempre muy discreta. Me gusta compartir mis temas profesionales, pero no mi intimidad que me la guardo para mí. Y entonces viene la parte dos, que es prejuzgar.

P. ¿Y cuáles son esas oscuridades, si las puedes contar?

R. He perdido a mucha gente querida que me ha dejado mucha huella. Me casé y me separé muy rápido. Son frustraciones que van llenando la mochila.

P. Te casaste muy joven.

R. Bueno, no tanto. Tenía 32 años. No salió adelante nuestro matrimonio, pero nunca lo he visto como un fracaso. Además, me llevo muy bien con mi exmarido.

P. Provienes de una familia aristocrática. ¿En qué influyen los escudos heráldicos?

R. Vuelvo a las etiquetas que no te dejan desarrollar una serie de ideas y proyectos. Hace poco se me cayó un gran cliente por mi perfil de familia aristocrática. ¿Eso es justo? Pues no. Y me ha pasado más de una vez que me ponen esas barreras. No me han regalado nada. Ni mis padres, que siempre nos han dicho "¿quieres algo?, pues gánatelo".

P. Tu apariencia física es casi la de una princesa de cuento.

R. Y lo piensa gente sin conocerme. Y por eso algunos (los menos) no me contratan, aunque mis proyectos sean los mejores. La niña que pertenece a una clase social determinada y se entretiene. No se molestan en ver mi curriculum, ni mis propuestas. Al estar en las redes parece que solo vivo de mi imagen. Y lo que hago es prepararme, estudiar y aprender. Como ahora, que además de mi licenciatura en Ciencias Ambientales estudio Humanidades.

"Al estar en las redes parece que solo vivo de mi imagen. Y lo que hago es prepararme, estudiar y aprender. Como ahora, que estudio Humanidades"

P. Tu abuelo el conde de Lebrija fue un gran impulsor de la cultura.

R. Y mi tía Isabel de León, que ha sido hasta hace poco presidenta de la Real Academia de Bellas Artes de Sevilla. Y mi antepasada la condesa de Lebrija, que era una aventurera que cuidó el palacio del siglo XVI con mosaicos romanos y una colección de arte impresionante.

P. ¿Por qué hay esa mala imagen de la aristocracia andaluza con la presencia del señorito?

R. Pagan justos por pecadores. Determinadas conductas por las que se juzga a la totalidad. Y en la otra cara de la moneda está Rafael de León, primo hermano de mi abuela, que era arte puro.

P. ¿Cuál es tu canción preferida de Rafael de León?

R. 'Ojos verdes' y 'A tu vera'. Para Rocío Jurado o Lola Flores, sus canciones fueron todo.

P. Estudiaste Ciencias Ambientales, ¿cómo elegiste una carrera tan inusual?

R. La verdad es que no la elegí por vocación. No tenía claro lo que quería estudiar. Un día vino mi padre a casa y me dijo: “María, ha salido una carrera que te puede interesar". Fue la primera promoción y en aquel momento tocaba muchos palos, pero nada concreto. Conocí a Eric Yerno, el fundador de la Agencia Réplica, que fue mi gran jefe y maestro. Murió el año pasado y fue un golpe muy duro. Y lo mismo con Carlos García Calvo, que fue mi padrino profesional. Recomiendo a los jóvenes que una vez que acaban el Bachillerato se tomen su tiempo para reflexionar el camino que quieren seguir y el que les va a hacer felices.

P. Te has dedicado a viajar. Mostrabas tu experiencia en Instagram ¿Lo hacías sola o acompañada?

R. Iba con una fotógrafa y hacíamos reportajes para 'Mujer Hoy', que era donde colaboraba. En el libro hablo de esos viajes que organizaba todo yo. Y en uno de los viajes humanitarios que hice al Congo me vacuné y fue lo que me produjo mi problema de audición. Me quedé sorda.

"En uno de los viajes humanitarios que hice al Congo me vacuné y fue lo que me produjo mi problema de audición. Me quedé sorda"

P. ¿Cómo te afecta en tu vida? ¿Te sentiste aislada?

R. Lo compartí porque era una manera de ayudar. Me escribe mucha gente para darme las gracias por mi testimonio. Si no usas audífonos el aislamiento es total. Es peligroso a nivel emocional porque estamos hechos para comunicarnos.

P. En una época formabas parte de la lista de futuribles como novia del rey Felipe.

R. Tenía veinte años y lo llevé muy mal. Fue un rumor que no era real. Lo curioso es que en aquel momento recibí propuestas para hacer reportajes y decidí que no. Estaba enfocada en mi carrera y en mi relación con Iñigo de Arteaga. Te he contado antes momentos sombríos y tristes de mi vida. Uno de los peores fue el accidente de avioneta de Íñigo, en el que falleció. Un palo muy grande.