Victoria Beckham no se mueve de Los Angeles
Victoria Beckham está algo cansada de los vaivenes futbolísticos de su esposo. Tras vivir varios años en Madrid -un auténtico calvario para ella-, parece que había
Victoria Beckham está algo cansada de los vaivenes futbolísticos de su esposo. Tras vivir varios años en Madrid -un auténtico calvario para ella-, parece que había encontrado su equilibrio en Los Ángeles, la meca de la frivolidad donde ir a comprar sin tacones está mal visto. Por ello, no permitirá que los planes de su marido estropeen su existencia estadounidense donde, supuestamente, triunfa como diseñadora. Por ello, la cantante no hará las maletas y no se irá con su marido a Milán, donde permanecerá unos meses por motivos deportivos.
El equipo AC Milán ha alquilado a David Beckham. Es decir, que jugará unos meses en este equipo mientras la liga norteamericana echa el cierre. Pese a la tentación -no hay que olvidar que Milán es la cuna de la moda-, Victoria no se mueve. “A David le gusta estar en América con Victoria y los niños, pero él sabe que necesita jugar partidos de alto nivel para mantener su puesto en la selección inglesa”, ha dicho una amistad al Daily Mirror. “Él intentará regresar a Los Ángeles lo máximo posible, pero no será fácil ni para él ni para su familia”, dice.
Victoria está muy asentada en las colinas de Beverly Hills, donde no hace falta mucho para ser considerada diosa del glamour. La cantante permanecerá en su residencia ya que sus hijos están escolarizados allí. Además, está muy ocupada trabajando en sus colecciones de moda, su principal pasión desde el intento frustrado de reflotar su antiguo grupo, las Spice Girls. “Victoria todavía cree que puede hacer algo grande en América, pero ella tiene miedo ya que su regreso a Europa puede matar su futuro en Hollywood para siempre”, dicen.
A principios de semana, algunos medios barajaron la posibilidad de que la pareja se separara. Según alegaron, los Beckham estaban sumidos en una profunda crisis. Sus respectivas carreras les obligaban a pasar mucho tiempo separados. Pero su matrimonio está a prueba de jets privados.
Victoria Beckham está algo cansada de los vaivenes futbolísticos de su esposo. Tras vivir varios años en Madrid -un auténtico calvario para ella-, parece que había encontrado su equilibrio en Los Ángeles, la meca de la frivolidad donde ir a comprar sin tacones está mal visto. Por ello, no permitirá que los planes de su marido estropeen su existencia estadounidense donde, supuestamente, triunfa como diseñadora. Por ello, la cantante no hará las maletas y no se irá con su marido a Milán, donde permanecerá unos meses por motivos deportivos.