Murdoch pone a la venta el velero en el que compartió confidencias con Pedro Jota

El magnate de la comunicación Rupert Murdoch pone a la venta uno de sus mayores tesoros, su lujoso velero. El Rosehearty, muy conocido entre todos aquellos cuyos bolsillos les permiten surcar las aguas en embarcaciones similares, sale al mercado por 23 millones de euros. Según informan fuentes cercanas al australiano, el motivo que le ha llevado a deshacerse de tan preciada propiedad es su falta de uso. “Le encanta el barco, pero últimamente no lo utilizaba mucho”, decían para así desmentir las informaciones que apuntaban a que el reciente divorcio de su tercera mujer, Wendi Deng (quien usaba mucho más la embarcación), era la verdadera razón.

Con la venta del Rosehearty, Murdoch no sólo se deshace de una propiedad. El creador de News Corporation deja en él miles de recuerdos. En alta mar, ha gestado grandes acuerdos.

Hace sólo dos veranos media España seguía con curiosidad los tuits de Pedro Jota Ramírez que no paraban de hablar de un extraordinario invitado a su casa de Mallorca del que no desvelaba su identidad. Después de dos días manteniendo en vilo a sus seguidores sobre el misterioso acompañante en la isla balear, la avidez de un periódico local reveló que la persona que se había citado con el director de El Mundo esos calurosos días de agosto no era otro que Rupert Murdoch.

Sobre él, el periodista había escrito en la red: “Con Murdoch me une una amistad personal basada en la pasión por el periodismo” y “He pasado seis horas apasionantes con un invitado especial”. Incluso se rumoreó que el australiano llegaba a la isla pitiusa dispuesto a comprar Unidad Editorial, algo que se apresuró a desmentir el riojanoen su cuenta de Twitter.Sin embargo, tanto (o más) que el invitado, sorprendió e impresionó a Pedro Jota el Rosehearty, el velero en el que ambos, acompañados por sus respectivas mujeres, Wendi Deng y Ágatha Ruiz de la Prada, surcaron las aguas del Mediterráneo esos días. No era para menos. La embarcación es una de las más lujosas del mercado. Con 56 metros de eslora, cuenta con cinco suites con capacidad para 10 pasajeros, gimnasio y jacuzzi en cubierta. Además cuenta con internet a bordo, pantallas de plasma de 60 pulgadas y equipamiento para hacer esquí acuático y buceo.

Diseñado por el francés Christian Liaigre

“Sigo abducido por la estampa del velero. Es una escultura mágica iluminando la oscuridad de la bahía”, tuiteaba el director de El Mundo con total admiración. El yate con el que había navegado esos días no sólo contaba con todo tipo de detalles, además era una obra de arte por sí mismo debido a su diseño de estética minimalista. El Rosehearty fue diseñadopor el francés Christian Liaigre, reconocido a nivel mundial.

Debido a los altos costes que supone el mantenimiento de una embarcación de estas características, muchos de los propietarios alquilan sus reliquias de alta mar. Murdoch, a través de una de las agencias más importantes en alquiler de embarcaciones de lujo, puso la suya a disposición de quien quisiera–y quien pudiera-por 220.000 euros a la semana.

Pero no sólo Pedro Jota Ramírez se ha paseado por la cubierta de esta embarcación, grandes personalidades de la talla de David Cameron o Mel Gibson también lo conocen de primera mano.

El próximo comprador no sólo podrá presumir de tener una de las embarcaciones más lujosas del mundo sino de sentarse en torno a la misma mesa en la que se negociaron grandesoperaciones del mundo de la comunicación. Algunas de ellas fallidas.