Estas son las palabras que más repiten las personas con mayor inteligencia, según la IA

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La inteligencia no solo se refleja en resolver ecuaciones complejas o en tomar decisiones acertadas. Un reciente análisis desarrollado con inteligencia artificial ha detectado que las personas con un alto cociente intelectual comparten algo tan cotidiano como el tipo de palabras que utilizan al hablar.

Y no, no se trata de un vocabulario técnico o inalcanzable, sino de expresiones que revelan mucho más de lo que parece. Según los resultados del estudio, quienes destacan por su capacidad cognitiva tienden a usar con frecuencia términos que denotan reflexión, análisis y conexión de ideas.

El lenguaje como espejo de la mente

Palabras como “por qué”, “relación”, “opción” o “posibilidad” se repiten con naturalidad en sus discursos. Esta elección de lenguaje indica una inclinación a buscar sentido, formular hipótesis y establecer vínculos entre conceptos, algo habitual en quienes poseen una mente analítica y abierta. Otro aspecto que ha llamado la atención de los investigadores es el uso reiterado de conectores lógicos y temporales.

Expresiones como “además”, “aunque”, “mientras” o “sin embargo” aparecen con frecuencia y sugieren una estructura de pensamiento clara, ordenada y con capacidad para argumentar con coherencia. Este tipo de lenguaje no solo aporta fluidez a la comunicación, sino que también refleja cómo la persona organiza sus ideas internamente. Pero no todo se queda en el plano racional.

No se trata de palabras difíciles

El análisis también ha detectado una presencia notable de términos relacionados con la metacognición, es decir, la capacidad de pensar sobre el propio pensamiento. Verbos como “considero”, “evalúo”, “pienso” o “reflexiono” son especialmente comunes entre las personas con una inteligencia superior, lo que sugiere una tendencia a observarse, cuestionarse y afinar sus procesos mentales.

Lejos de ser una coincidencia, este patrón lingüístico pone de manifiesto que la forma en la que hablamos puede ofrecer pistas relevantes sobre cómo funcionamos por dentro. La inteligencia, según este análisis, también se mide en cómo articulamos el mundo con palabras.

Pensar sobre lo que se piensa

La manera en que nos expresamos puede ser una puerta abierta a nuestra forma de razonar. Y quizás, prestar atención a cómo hablamos, también nos ayude a pensar mejor.