Esta es la rutina de limpieza de casa que puedes seguir en 1 hora y que parece que hayas estado más

• El sencillo truco para dejar la casa limpia y recogida para el fin de semana en solo 20 minutos
• Adiós al polvo: esta es la rutina de limpieza semanal fácil y rápida que hará que tu casa se vea increíble y no cunda el caos

Mantener la casa limpia sin dedicarle horas es posible. Así lo demuestra la creadora de contenido @huele.a.limpio, que ha compartido una rutina sencilla y eficaz para dejar el hogar impecable en tan solo una hora. Su propuesta parte de una idea clara, no se trata de limpiar más, sino de limpiar mejor.

El secreto, explica, está en seguir siempre un orden para no perder tiempo y evitar esa sensación de estar haciendo mucho sin avanzar. “Si limpias un rincón de la cocina, luego te vas a la habitación de al lado y solo haces una cama, al final estás perdiendo tiempo”, comenta. La clave está en mantener una secuencia lógica y práctica que permita aprovechar cada minuto.

La rutina comienza abriendo las ventanas y destapando las camas para ventilar y renovar el ambiente. Después conviene recoger lo que esté fuera de lugar y dejar las superficies despejadas antes de empezar. Una vez hecho esto, se hace la cama, se limpian las mesas y las encimeras y se pasa un paño por las zonas de uso diario para eliminar el polvo.

El baño también forma parte de este plan rápido. Con limpiar el lavabo, el espejo y las áreas de mayor uso es suficiente para mantener una sensación de orden y frescura. Luego se pasa el aspirador por toda la casa y, si es necesario, se termina con un fregado ligero del suelo. “Si tienes aspirador, olvídate de la escoba para siempre”, aconseja la autora.

El objetivo de esta rutina no es dejar la casa perfecta, sino mantenerla bajo control. La creadora recomienda repetirla varias veces por semana y adaptarla a los horarios de cada persona. Quienes trabajan por la mañana pueden hacerlo por la tarde, y quienes tienen más tiempo libre durante el día pueden aprovechar las primeras horas.

Para ella, la limpieza no debe ser una carga, sino un hábito que aporte bienestar y orden mental. “Cuanto menos tiempo utilices para limpiar, mejor, porque más tiempo libre tienes para ti”, explica. Y recuerda una máxima sencilla que resume su filosofía, no es más limpio quien más limpia, sino quien menos ensucia.