El humilde menú ‘low cost’ de Harry y Meghan entre acusaciones de despilfarro

Los numerosos vuelos privados que el príncipe Harry y Meghan Markle utilizaron durante sus vacaciones, además de cargarse su imagen de ecologistas, les ha colgado el cartel de despilfarradores. Más aún cuando los duques de Cambridge usaban una aerolínea de bajo coste para trasladarse recientemente a Escocia.

Quizá por eso, para dar una imagen de humildad, los duques de Sussex acudían con su hijo a cenar al modesto y tradicional pub Rose & Crown en Winkfield (Berkshire), a diez minutos en coche de su casa en Frogmore Cottage.

Ver esta publicación en Instagram

Oooooooo new menu. For a easy read version go to www.roseandcrownwinkfield.co.uk #ascot #windsor #goodfood

Una publicación compartida de The Rose and Crown (@rosecrownwoodside) el 18 Jun, 2019 a las 8:39 PDT

Ver esta publicación en Instagram

#lavender #theroseandcrownpub #restaurant #pub #woodside #ascot #windsor

Una publicación compartida de The Rose and Crown (@rosecrownwoodside) el 9 Jul, 2018 a las 10:52 PDT

¿El menú? Un típico y sencillo asado inglés a razón de 15 libras por cabeza que Harry acompañó de un par de pintas mientras que la norteamericana bebió solo agua. Dos testigos presenciales declararon al diario ‘The Sun’ que el resto de comensales apenas se percataron de su presencia a pesar de que iban acompañados por el pequeño Archie, “que se comportó de manera ejemplar”, por dos miembros de su equipo de seguridad y por una tercera persona que se sentó a la mesa con ellos.

“Estaban en una mesa con, supongo, su secretaria privada”, continuaba el relato de los testigos. “Meghan tuvo al bebé en brazos casi todo el tiempo. El pequeño era más bueno que el pan. No le oí llorar ni una vez. Ninguno de los otros clientes les reconoció, el personal obviamente sí, pero se comportaron con discreción. Se notaba que eran habituales del pub”.

Este pequeño gesto puede servir para que los duques recuperen un poco el favor del pueblo tras un verano plagado de críticas. Además de los más de 20.000 euros que les habrían costado solo los vuelos, tanto en Niza como en Ibiza se han alojado en villas muy exclusivas que podrían haberles costado hasta 120.000 euros semanales. Por supuesto, en uno y otro destino han estado acompañados del correspondiente equipo de seguridad, aumentado así un gasto que muchos exigen saber de dónde ha salido, ya que este es un punto que escuece especialmente a los británicos, puesto que creen que se aprovechan de su posición dentro de la familia real en cuanto a retribuciones y cuestiones económicas, pero no corresponden al pueblo, guardándose muchos aspectos de su vida que la gente querría conocer, especialmente todo lo concerniente a Archie, solo para ellos.