El truco de estilo de Rania de Jordania en su última foto familiar

Los reyes jordanos se encuentran en la cumbre de Sun Valley, en la 38ª edición, que se celebra cada año durante cinco días en el estado de Idaho, en Estados Unidos. Y no están solos, sino con el príncipe heredero, Hussein de Jordania, y su mujer, la princesa Rajwa.

Con una ropa informal, ellas con diseños denim de corte midi similar con falda de vuelo, y ellos con pantalón de pinzas y camiseta con el clásico chaleco de esta conocida cumbre o con camisa abierta, nos hemos fijado en el truquito de Rania de Jordania para parecer de la misma altura que su hijo mayor y su nuera.

La reina jordana optaba por un vestido de manga corta de la firma Vocavaca con pinzas en la cintura, y su nuera elegía un conjunto de falda con cinturón y body de la marca Alaïa con capucha. Mientras la joven de origen saudí lleva deportivas planas, la reina de la corte hachemita se calzaba unas sandalias de plataforma de piel.

Un diseño de color marrón, de la firma See by Chloé, con una gran altura de tacón ancho, que la elevaba al plano de la princesa Rajwa, situada a su lado, y de su hijo y su marido. Haciendo que en la estructura de la foto quedaran todos en la misma línea horizontal de altura, dando un carácter más simétrico a la imagen.

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Los cuatro están disfrutando de esta cumbre para multimillonarios que arrancaba este pasado miércoles, 12 de julio, en el que las conferencias sobre negocios, economía y tecnología se mezclan con el lujo y las aficiones deportivas de sus asistentes.

Entre los que se espera este año, están la presentadora y empresaria Oprah Winfrey; el creador de Facebook, Mark Zuckerberg; personalidades como Bill Gates; el codirector ejecutivo de Netflix, Ted Sarandos; o el director ejecutivo de Walt Disney Company, Bob Iger, entre otros.

Grandes emprendedores que se congregan en este evento anual organizado en el Sun Valley Lodge, un histórico resort de lujo, con 108 habitaciones, un spa de más de 1.800 metros, que incluye gimnasio, piscina al aire libre, además de diferentes restaurantes y salas para conferencias. Tras las charlas, sus multimillonarios asistentes suelen dar largos paseos por la montaña, jugar al golf o pescar con mosca, además de coger la bici.