El lenguaje corporal de la princesa Leonor en la escuela naval de Marín: sus gestos clave y significado
Cada una de las apariciones públicas de la heredera al trono se mira con lupa. Hoy analizamos su lenguaje no verbal durante el acto de ingreso en la escuela naval
La formación militar de la princesa Leonor sigue adelante, con su ingreso en la escuela naval de Marín el jueves 29 de agosto. A sus 18 años, la hija de Felipe VI se prepara para, en un futuro, sustituir a su padre al frente del trono de España.
Llegó sola, al contrario que cuando ingresó en la Academia General Militar de Zaragoza. A su llegada, pudo conocer a sus superiores, quienes la guiarán a lo largo de esta nueva etapa que comienza y que durará hasta el mes de diciembre. Se trata del mismo centro donde su padre recibió formación castrense.
Una de las cosas que más nos ha llamado la atención, y que no es la primera vez que observamos, ha sido su forma de caminar. La hemos visto segura, con una postura muy firme. Un gesto que concuerda con el análisis que ya realizó Cristian Salomoni, director del Instituto Internacional de Análisis de la Conducta y experto en comunicación no verbal: "Su lenguaje no verbal denota que está lista". Unas palabras con las que explicaba, cuando la princesa llegó a Zaragoza, que está preparada para el importante papel que tiene que asumir.
También nos hemos fijado en su sonrisa, un gesto que la acompaña en casi todas las ocasiones en las que aparece en público. Hemos detectado una sonrisa genuina en algunos momentos, puesto que sus ojos participan en ella, algo esencial para determinar que se trata de un gesto verdadero. Se le conoce como sonrisa de Duchenne y lleva su nombre en honor a Guillaume Duchenne, quien la identificó en sus investigaciones sobre las expresiones faciales.
Esta sonrisa se caracteriza porque no solo los músculos de la boca están activos, sino también los que están alrededor de los ojos. Algo que no ocurre cuando hablamos de una sonrisa falsa, donde, aunque la boca sonríe, los ojos no participan, lo que sugiere que la persona podría estar fingiendo esa alegría.
Hay otro tipo de sonrisa en la que simplemente se curvan los labios hacia arriba, pero tampoco participan los ojos, conocida como sonrisa educada o cortés. Es la que hemos visto durante la firma de la princesa Leonor en el libro de honor. Quizás sea muy parecida a la que hemos observado en otras ocasiones. "Es igual a la sonrisa nerviosa que a veces tiene. Es una situación muy emotiva para ella", explicó el experto en el análisis de la ceremonia en Zaragoza que la convertía en oficial del Ejército.
La formación militar de la princesa Leonor sigue adelante, con su ingreso en la escuela naval de Marín el jueves 29 de agosto. A sus 18 años, la hija de Felipe VI se prepara para, en un futuro, sustituir a su padre al frente del trono de España.
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