Último adiós a Ivana: de la tristeza de sus hijos al 'accidente' de Donald Trump y Melania

A la una y media de la tarde comenzaban a llegar los familiares, amigos y conocidos a la iglesia de San Vicente Ferrer para darle el último adiós a Ivana Trump. Agentes del servicio secreto de Estados Unidos y reporteros se agruparon a las afueras del templo de Manhattan a primeras horas de la mañana, pues se esperaba la asistencia de rostros conocidos, entre los cuales no ha faltado Donald Trump. Ivana falleció el 14 de julio por culpa de una trágica caída por las escaleras de su apartamento en Nueva York, misma ciudad donde hoy se recuerda a la socialité y sus hijos reciben el pésame de aquellos que la conocieron.

Ivanka, Donald Jr. y Eric llegaron al mismo tiempo a la iglesia, acompañados de sus respectivos cónyuges e hijos. Vestidos de luto riguroso y con semblantes serios, los hijos y nietos de la fallecida se colocaron a las afueras del templo en línea y se abrazaban entre ellos como muestra de apoyo y fuerza. Unos instantes después llegó el féretro cargado por varios hombres y toda la familia contempló solemnemente su entrada en la iglesia. En este momento, no se vio al expresidente de Estados Unidos, pero sí estuvo presente en el tanatorio Frank Campbell en el momento de recoger los restos de la que fue su primera esposa y gran apoyo desde 1977 a 1992.

El motivo de la comentada ausencia de Donald Trump en la entrada a la iglesia se desconoce, pero lo cierto es que él y su actual esposa llegaron aproximadamente unos 10 minutos después de que cerraran las puertas. Este retraso ha causado muchos comentarios, pues toda la familia al completo, incluida Melania, estuvo poco antes en el tanatorio para hacer el camino en procesión hasta el lugar donde se celebra el funeral. Es probable que el expresidente, sabiendo que sería uno de los asistentes más esperados por la prensa, quisiera evitar ser el centro de atención en un momento tan delicado y doloroso.

Solo la llegada de los seres queridos y familiares de Ivana Trump ha sido de cara a las cámaras, pues una vez cerradas las puertas, la ceremonia se llevó a cabo en la más estricta intimidad. Sin embargo, se puede esperar que haya fotografías de este emotivo momento en los próximos días -quizá en las redes sociales de sus hijos- porque una de las últimas personas en llegar a la iglesia fue una fotógrafa profesional que no halló dificultad en entrar al recinto.

Este ha sido un funeral cargado de emoción, pues tal como consta en los comunicados difundidos por la familia tras el terrible accidente, la difunta era muy querida por todos los que la llegaron a conocer. “Me entristece mucho informar a todos los que la amaban, que son muchos, que Ivana Trump falleció en su casa en la ciudad de Nueva York. Era una mujer maravillosa, hermosa y sorprendente, que llevó una vida grandiosa e inspiradora. Su orgullo y alegría eran sus tres hijos, Donald Jr., Ivanka y Eric. Estaba tan orgullosa de ellos,como todos lo estábamos de ella. ¡Descansa en paz, Ivana!”, eran las palabras concretas con las que su exmarido daba la triste noticia de su muerte a la edad de 73 años.

El columnista e íntimo amigo de la fallecida, Robert Couri Hay, aseguró que "todos queremos recordar a Ivana como la persona vibrante y sociable que fue", y es que su historia es, como mínimo, sorprendente. Llegó a la vida del expresidente de los Estados Unidos a inicios de la década de los setenta y no lo hizo con la intención de ser una cónyuge tranquila y serena, sino con las ganas de poner su sello dentro del imperio de su marido.

La mujer de origen checo venía de participar en los Juegos Olímpicos de 1972 como parte del equipo de esquí, además de ser una de esas tantas personas que huyó de los regímenes comunistas. Madre querida, sus vivencias le otorgaron una gran seguridad y determinación, además de un reconocido carácter fuerte y dinámico, que derivaron en un éxito rotundo en el mundo de los negocios.

Este es el legado que ha sido recordado hoy y que su hija, Ivanka, quiso tener presente cuando se enteró de la pérdida de su madre. "Mamá era brillante, encantadora, apasionada y retorcidamente graciosa. Demostraba fuerza, tenacidad y determinación en cada una de sus acciones. Vivió su vida al máximo, sin perder la oportunidad de reir y bailar", reza el breve comunicado que publicó en Instagram para sus 7 millones y medio de seguidores un día después de la muerte de su madre.

Donald Jr. y Eric también coinciden con su hermana a la hora de describir a su querida madre, destacando su sentido del humor y la aventura, así como su belleza y su rol de madre cariñosa. Algunos medios, basándose en fuentes cercanas a la familia Trump, aseguran que los tres hijos de Ivana y Donald han sido los encargados de pronunciar discursos en honor a su progenitora. Sin embargo, solo el tiempo podrá confirmar esta información y, quizá se desvele el contenido de sus emotivas dedicatorias.