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La gran madre blanca
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La gran madre blanca

Cuenta la leyenda -qué árida sería la Historia sin leyendas- que, allá por el siglo XIII, el entonces conde de Champagne Thiébaud -Teobaldo- IV, apodado 'Le

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La gran madre blanca

Cuenta la leyenda -qué árida sería la Historia sin leyendas- que, allá por el siglo XIII, el entonces conde de Champagne Thiébaud -Teobaldo- IV, apodado 'Le Chansonier', puso sus ojos pecadores en Blanca de Castilla, reina de Francia, esposa de Luis VIII y madre de Luis IX, al que hoy conocemos como san Luis rey de Francia.

El rey que acabó en los altares, enterado del asunto, ordenó al enamoradizo Teobaldo partir de inmediato a la Cruzada; el rey francés participó en las dos últimas, hasta que halló la muerte, en 1270, durante el sitio de Túnez, un sitio bastante alejado de Tierra Santa. Enviar a alguien a las cruzadas era, poco más o menos, condenarlo a muerte, ya que pocos eran los caballeros cruzados que regresaban a la patria.

Nuestro Teobaldo fue uno de los afortunados. Bien es verdad que el regreso le llevó algún tiempo, aunque no tanto como el que invirtió Ulises en regresar a Ítaca tras la guerra de Troya.

En ese viaje desde Palestina a Francia recaló en la isla de Chipre, en la que encontró una variedad de uva que debió de parecerle extraordinaria, porque se la llevó a su tierra. Esa uva sería la que hoy conocemos como Chardonnay.

Como dicen los italianos, 'se non é vero, é ben trovato'. El hecho es que Teobaldo llevó a la Champagne la que hoy se considera, unánimemente, la mejor uva blanca vinificable del mundo, una de las tres clásicas que entran en la elaboración del champaña; y la única blanca, porque las otras dos son tintas, la Pinot Noir y la Pinot Meunier. De todos modos, los vinos de la Champagne tardarían aún bastante tiempo en ser como son hoy.

La difusión del Chardonnay

Pero el bueno de Teobaldo debió pasar, para regresar a su condado, por la Borgoña. Es curioso que las zonas vinícolas más importantes de Francia tardaron bastante en integrarse en la corona francesa: la Champagne tenía sus condes, Burdeos era 'propiedad' británica y en la Borgoña, cuyo gobernante era duque, el único rey reconocido era... el vino. Sigue pasando, dicho sea de paso, en la V República.

Y en la Borgoña la Chardonnay se hizo grande. Será difícil que alguien discuta que los mejores vinos blancos del mundo proceden de esa región. Hablar de Montrachet, o de Puligny-Montrachet, Chassagne-Montrachet, Bâtard-Montrachet y algunos más es hablar de algunos de los más grandes vinos de la cristiandad. Vinos blancos hechos para durar, que dan lo mejor de sí mismos unos cuantos años después de la vendimia.

Hay todavía gente que piensa que el vino es tinto, y que el mejor blanco es un tinto. Craso error. Las investigaciones arqueológicas nos han enseñado que los vinos que se servían en la mesa de Tutankamón eran blancos; sabemos que los vinos que cantaban y elogiaban, en el Siglo de Oro español, autores como Cervantes o Quevedo eran blancos, y recientemente se ha descubierto una norma eclesiástica renacentista que recomendaba consagrar vino blanco; bien es verdad que esta norma tenía como objeto no manchar los paños del altar, que con el tinto quedaban hechos una pena.

La Chardonnay es, seguramente, la uva blanca más extendida en el mundo. Yo he bebido chardonnays borgoñones excelsos, pero también blancos de esa cepa elaborados en Nueva Zelanda, Sudáfrica, California y, sobre todo, Chile; cómo responde la Chardonnay en tierras chilenas es un prodigio. Así que, cuando deseen homenajearse con un grandísimo vino blanco, descorchen un chardonnay fermentado en barrica... y dediquen un recuerdo a ese benefactor de la humanidad que se llamó Thiébaud IV de Champagne y salió demasiado enamoradizo. Se merece un brindis.

Cuenta la leyenda -qué árida sería la Historia sin leyendas- que, allá por el siglo XIII, el entonces conde de Champagne Thiébaud -Teobaldo- IV, apodado 'Le Chansonier', puso sus ojos pecadores en Blanca de Castilla, reina de Francia, esposa de Luis VIII y madre de Luis IX, al que hoy conocemos como san Luis rey de Francia.