Cómo cuidar tu cuero cabelludo para evitar la caída

Este mes es durísimo, te metes en la ducha, te estás lavando tu melena y cuando miras tu mano está llena de pelo. Seguro que ya has probado todo tipo de champús y mascarillas, pero es que quizá el problema no está donde creías.

El cuero cabelludo es la clave de la pérdida del pelo, esta piel que cubre el cráneo es más sensible de lo que imaginas. Como la del resto del cuerpo, excepto las palmas de las manos y de los pies. Pero se trata de una piel muy vascularizada, con una profusión enorme de vasos sanguíneos cuyo objetivo es transportar nutrientes hasta los folículos pilosos, los bulbos donde nace el cabello y donde se inserta el músculo piloso, el responsable de elevar el pelo. Si ese tránsito sanguíneo se lleva a cabo sin problemas, los nutrientes son de buena calidad y la piel del cuero cabelludo está limpia y bien hidratada, el pelo crecerá sano y fuerte. Un cúmulo de residuos, agresiones mecánicas como masajear con las uñas en lugar de con las yemas de los dedos o peinar con fuerza obstaculizan la microcirculación sanguínea y el delicado equilibrio del cuero cabelludo se altera.

¿Pero por qué se cae el cabello? Es muy sencillo, nos lo explican los expertos de los laboratorios Kosei: "La caída estacional del cabello se produce como adaptación del organismo a las variaciones del clima, la temperatura y la luz. El cabello crece más rápido durante el verano a causa del calor y las radiaciones ultravioleta. Este crecimiento se frena de forma masiva al llegar el otoño, cuando la temperatura y la intensidad de la luz disminuyen. La caída del pelo en otoño y en primavera no es una pérdida de pelo, sino una renovación capilar. Es decir, el cabello muere y tarda unos tres meses en caer".

¿Qué es un cuero cabelludo sano?

Es un cabello hidratado. “El cabello necesita entre un 15 y un 17% de agua para mantener una buena tasa de hidratación”, dice el doctor Horacio Foglia, director médico de Medical Hair España. “La deshidratación altera el equilibrio hidrolipídico y la consecuencia es un cuero cabelludo y un cabello secos y apelmazados”, subraya.

¿Una buena alimentación es la base?

Lo que comemos es clave. En líneas generales, hay que incluir en la dieta muchas verduras, frutas y legumbres, y reducir al máximo el consumo de grasas y sal porque son dos grandes debilitantes del cabello. Hay alimentos especialmente recomendables: espinacas, nueces y semillas contienen biotina, una sustancia que fortalece el pelo y le proporciona brillo. Aguacates, frutos rojos y cítricos son ricos en ácido fólico, que refuerza la raíz del pelo y estimula su crecimiento.

¿Maltratamos el pelo cuando nos lo lavamos?

Pues depende. No hay problema en lavarse el pelo a diario porque, al igual que el resto de la piel de todo el cuerpo, también la del cuero cabelludo debe estar limpia y libre de residuos de todo tipo. Solo así la raíz permanecerá sana y el cabello crecerá bien. Hay que tener en cuenta que el lavado tiene una finalidad higiénica: al lavarlo, siempre con agua templada para no deshidratar la fibra capilar, eliminamos las sustancias contaminantes y evitamos la formación de infecciones.

¿Usamos demasiados productos y lo intoxican?

El exceso de productos le perjudica porque van depositando residuos que no se van con los lavados y asfixian literalmente esta delicada piel. Y una piel asfixiada no puede realizar bien sus funciones de intercambio de oxígeno, lo que se traduce de inmediato en un pelo debilitado. Un cuero cabelludo sano solo necesita un champú neutro que alternará con uno tratante si tuviese algún problema.

¿Por qué pica a veces el cuero cabelludo?

A veces utilizamos productos con un pH demasiado bajo o muy alto que arrastran el manto ácido del cuero cabelludo, el escudo protector de la piel, y lo dejan expuesto a la acción de todos los agentes agresivos con los que se vaya encontrando: otros productos, sustancias contaminantes, polvo, etc.

En el neceser

Champú Tratante Calmante (11,90 euros), Crema Lavante Ultracalmante (15,90 euros) y un Sérum Calmante Antipicores (11,90 euros), de Phyto. La rutina de tratamiento que calma y alivia el cuero cabelludo sensible e irritado. Productos 'extintores' para reconfortar el cuero cabelludo sensible y calmar las crisis.

Rene F. Lumicia Champú Brillo (13,90 euros). Champú especialmente recomendado para cabellos apagados, sin vida, aporta al cabello un brillo extremo, liberándolo de impurezas gracias a su preparación ancestral a base de macerar vegetales

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Vichy Dercos Champú Anticaída (19,95 euros). Sin duda, el complemento ideal para el tratamiento anticaída de cabello. Su función es conseguir un cabello más fuerte, vigoroso, ya que actúa de raíz a puntas, recuperando la vitalidad.

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Extreme Caviar Exfoliating Scrub Scalp Mask, de Miriam Quevedo (35 euros). Madreperla de Tahití y arena de coral son los exóticos ingredientes, que exfolian la piel con respeto. Se extiende con un suave masaje, se deja actuar y se retira con agua antes del champú.

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Hierbas de Lavanda es la propuesta de My Organics para cueros cabelludos irritados (38 euros). Imagina dejar reposar durante unos minutos una infusión de lavanda sobre el cuero cabelludo y experimentar sus efectos calmantes.

Huile Apaisante, de Leonor Greyl (32 euros). El estrés, la contaminación y los champús mal aclarados alteran el equilibrio del cuero cabelludo, que expresa su malestar con irritación o picores. Una fórmula a base de aceites en formato roll on.

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BC Scalp Genesis Serum, de Schwarzkopf (31,76 euros, 7 ampollas). Activa la raíz del cabello. Se utiliza después del champú. Está dirigido a fortalecer el cabello más débil.

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Tricoxil Loción Anticaída, de Kosei (14,90 euros), permite aumentar el número y grosor del cabello. Reduce la caída en un 60,67% tras 3 meses de uso. Aumenta el número y grosor del cabello.