Ni Segovia ni Estremera: este es el pueblo cerca de Madrid más bonito para visitar en primavera

En plena temporada de escapadas de fin de semana, los madrileños están buscando alternativas tranquilas y con encanto para desconectar del ritmo urbano. Según un análisis de la compañía SIXT basado en datos de búsqueda de Google, las consultas sobre “pueblos con encanto a 3 horas de Madrid” han aumentado un 125% solo en el último mes. Entre todos los destinos, Brunete lidera el ranking con más de 60.500 búsquedas, lo que supone un aumento del 22% respecto al mes anterior.

Este interés no es casual. Brunete, situado a solo 28 kilómetros al oeste de Madrid, se ha ganado un lugar privilegiado entre las escapadas favoritas por su equilibrio entre patrimonio histórico y espacios naturales.

Un pueblo con mucha historia

Brunete fue escenario de una de las batallas más importantes de la Guerra Civil Española, entre el 6 y el 25 de julio de 1937. Las huellas de aquel episodio aún pueden rastrearse en el entorno, con restos de fortificaciones y referencias históricas que forman parte del relato local.

Su Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, construida en el siglo XVI y reconstruida tras los daños de la guerra, destaca como uno de los monumentos más significativos. A esto se suma la Plaza Mayor, declarada Bien de Interés Cultural en 2016, con su traza herreriana inspirada en las Leyes de Indias.

Brunete también es puerta de entrada a rutas naturales de gran belleza. Su cercanía al Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama lo convierte en una base excelente para senderistas, cicloturistas y amantes del aire libre. La zona ofrece humedales, encinares y caminos rurales ideales para pasar un día de campo sin aglomeraciones.

Además, su fácil acceso en coche —menos de 40 minutos desde el centro de Madrid— hace que sea una elección cómoda para quienes quieren planificar un día diferente sin grandes desplazamientos.

El notable aumento en las búsquedas confirma lo que muchos ya han descubierto: Brunete es un destino ideal para una escapada primaveral, con historia, encanto rural y tranquilidad. Si aún no lo conoces, esta puede ser la temporada perfecta para descubrirlo.