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Albert Rivera y Malú, una íntima amistad en cifras
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SORPRENDENTE RELACIÓN

Albert Rivera y Malú, una íntima amistad en cifras

Ni el político ni la cantante poseen un patrimonio inmobiliario destacado. Ella tiene una empresa que da altos beneficios, él basa sus ingresos en su trabajo en el Congreso

Foto: Malú, en una imagen de archivo. (Getty)
Malú, en una imagen de archivo. (Getty)

Ni Malú ni Albert Rivera son dos personas apegadas al ladrillo. Y eso que la primera lleva años dejándose la piel sobre los escenarios, lo que podría haberse traducido en un patrimonio inmobiliario notable. Pero no, es una artista sencilla con un patrimonio acorde a sus gustos.

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No sabemos si los gustos de Rivera son tan sencillos como los de Malú, aunque podría ser, si tenemos en cuenta que pese a residir en una casa unifamiliar en una urbanización de diseño en Pozuelo, el político vive de alquiler. Con todo, dos hipotecas pesan sobre sus espaldas. Ahora que se les ha relacionado sentimentalmente, analizamos en cifras a la pareja.

placeholder Albert Rivera, en una rueda de prensa. (EFE)
Albert Rivera, en una rueda de prensa. (EFE)

El presidente de Ciudadanos contrajo dos hipotecas con su primera pareja y madre de su hija, Mariona Saperas. Fue en 2004 y en 2008, y todavía no las ha liquidado. La expareja compró sendos inmuebles en La Garriga y en Granollers, de donde proceden y donde todavía vive Saperas. Por el primero pidieron un préstamo de 165.000 y, según la declaración de bienes del Congreso, todavía deben 107.000. Por el segundo inmueble, el crédito era de 306.000 euros y deben 254.800. Los datos son de finales de 2016, así que seguramente han podido liquidar algo más de su deuda. Las propiedades fueron compradas al 50% cada uno.

Yamaha y Golf

Motero y rockero, a Rivera le encanta salir a rodar por las carreteras con su Yamaha FZ1, que se compró en 2009. Además, para ser algo más práctico, tiene un Golf desde 2012. Según el portal Transparentia, donde se pueden consultar los sueldos de todos los cargos públicos españoles, Rivera cobra 68.060 euros brutos anuales, lo que supone un sueldo bruto mensual de 4.861 euros. Su salario base, como diputado de las Cortes, es de 2.891 euros, a lo que hay que añadir un complemento de 1.075 euros y unas dietas de 894 euros.

Malú es algo más ambiciosa en cuanto a patrimonio se refiere. Tiene dos casas y ambas están solo a su nombre. La primera, una vivienda de 416 metros cuadrados en Majadahonda, es una casa con jardín y zona de recreo que compró en 2004.

placeholder Malú, en un concierto en Aranjuez. (EFE)
Malú, en un concierto en Aranjuez. (EFE)

La otra casa es la vivienda de su madre, Pepi Benítez. La propiedad, sita en Aravaca, es una vivienda unifamiliar en la urbanización El Plantío, según el Registro de la Propiedad. Una casa de 291 metros cuadrados de la que la madre de la cantante era titular desde 1999. El Plantío es una de las zonas de lujo a las afueras de Madrid, como lo son La Florida y La Moraleja. La primera casa de David Beckham en Madrid estaba en la misma zona.

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Y es en El Plantío donde Malú tiene registrada su única empresa, de la que es socia junto a su madre. Aprendiz y Canciones Sl, dedicada a la creación musical y literaria, fue creada en 1998, año en el que publicó su primer disco, 'Aprendiz' (disco Platino), nombre de la empresa. El último balance presentado y aceptado es el de 2015 (el de 2017 fue presentado con errores y no cuenta), cuando declaró unos ingresos brutos de 1.163.000 euros y unos beneficios netos de 129.907 euros.

Por su parte, Rivera solo aparece en el Registro Mercantil como presidente de Ciudadanos y fundador del partido de la Ciudadanía, es decir, por su relación con la política. Nunca ha creado o emprendido algún proyecto y su primer trabajo fue en La Caixa, empleo que abandonó para dedicarse a su pasión: la política.

Ni Malú ni Albert Rivera son dos personas apegadas al ladrillo. Y eso que la primera lleva años dejándose la piel sobre los escenarios, lo que podría haberse traducido en un patrimonio inmobiliario notable. Pero no, es una artista sencilla con un patrimonio acorde a sus gustos.