Maribel Verdú se convierte en abuela a los 40 años

El marido de Maribel Verdú está de enhorabuena: Pedro Larrañaga se ha convertido en abuelo por primera vez. El hijo mayor del productor, de 28 años, acaba de ser padre de un niño y ha transformado, por extensión, a Verdú, a sus 40 años, en ‘abuelastra’. Un  nacimiento que hace a Carlos Larrañaga y María Luisa Merlo bisabuelos.

El veterano actor se ha mostrado muy ilusionado esta semana mientras acompañaba a su hija Amparo Larrañaga a recoger la Estrella  de Oro que otorga el Club de Medios. “Estoy muy feliz de ser bisabuelo por primera vez”, comentaba Carlos Larrañaga en conversación con Vanitatis.  A sus 74 años, el intérprete dice haber sentado la cabeza y quiere disfrutar de sus hijos, sus nietos y ahora de su bisnieto.

Tras su separación de Ana Escribano en septiembre de 2008, el actor permaneció en Torrelodones en una vivienda de la familia de su mujer para estar más cerca de su hija, pero ahora se ha mudado a una céntrica calle de la capital. “Yo soy muy urbanita. Necesitaba ciudad y menos campo”, señala el actor. Pero no es el único cambio que ha tomado Carlos Larrañaga: el actor quiere vivir lejos de la venta de exclusivas de su vida privada. “Eso pertenece a un tiempo pasado. Ahora no voy a vender nada de nada”, afirma.

Desde que Carlos Larrañaga ha vuelto a la ciudad, está mucho más cerca de sus hijos mayores, Amparo, Kako, Luis y Pedro. Este último y Maribel Verdú conforman uno de los matrimonios más estables del panorama teatral. Hace 12 años contrajeron matrimonio. La pareja no tiene hijos. En más de una ocasión, la actriz ha comentado que no ha sentido la llamada de la maternidad. A su marido la paternidad le llegó antes de cumplir los 20 años y ahora es su hijo mayor quien les ha hecho abuelos por primera vez.

Pedro Larrañaga, productor teatral y el cerebro económico de la familia, ha conseguido hacer del oficio de los cómicos un negocio muy rentable. A su lado, siempre Maribel Verdú. La madrileña ha conquistado el corazón de todos los miembros de la familia de su marido. En más de una ocasión hemos visto como la actriz lucía verdaderas joyas de la tía Amparo Rivelles. La veterana actriz está retirada aquejada de problemas de movilidad, pero su cabeza se mantiene tan brillante como siempre. “Hace unos días, mi tía Amparo nos dio una lección de profesionalidad. Cogió un texto, lo leyó y memorizó a la primera”, comenta muy orgullosa Amparo Larrañaga.

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