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Vestidos para novias con toques de color: una tendencia en alza este verano
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DETALLES MUY ESPECIALES

Vestidos para novias con toques de color: una tendencia en alza este verano

El blanco cede una pequeña parcela de protagonismo a otros tonos para salpicar los vestidos de novias más perseguidos de la temporada. Inspírate con estas ideas

Foto: Un vestido de novia de Alicia Rueda. (Instagram/ @aliciaruedaexperience)
Un vestido de novia de Alicia Rueda. (Instagram/ @aliciaruedaexperience)

Si algo nos está dejando claro 2022, es que las tendencias de moda nupcial no dejan de evolucionar ni un solo día. Mientras hay novias que han renunciado por completo al vestido para lucir un look con pantalón o un dos piezas de chaqueta y falda, o cómo las más arriesgadas huyen del blanco para teñir sus modelos de rosa empolvado, azul cielo o verde menta, también hemos detectado una nueva corriente en alza. Idónea para mujeres que quieren marcar la diferencia con algún que otro detalle especial, pero no están dispuestas ni a prescindir al vestido, ni del blanco como color principal.

El clásico inmaculado cede una pequeña parcela de protagonismo a otros tonos para salpicar los vestidos de novias más perseguidos de la temporada. En mangas con bordados florales, cuerpos con apliques joya metalizados o en cinturones a contraste, se llevan los toques de color. Ficha estas ideas.

Cerrado desde finales de 2021, las 'bride to be' que acudían al taller de Belén Barbero, diseñadora de Bebas Closet, lo hacían con un objetivo de estilo común: vestir de blanco, pero con adornos de color rompedores. A su disposición, ramilletes, retales de encaje, piezas antiguas, strass, formas voluminosas y aplicaciones que rompían con la estética impoluta del traje y dotaban a la novia de una personalidad sin igual. A día de hoy, sus diseños siguen pululando por las redes sociales como una fuente de inspiración inagotable.

De los grandes detalles a accesorios sencillos y minimalistas que solo por el cambio de color con respecto al principal del vestido, son estrellas del atuendo nupcial. Esta es la propuesta de Marcela Mansergas y el negro, su tono fetiche para ponerla en práctica. Muy fino y con un grosor de apenas un par de centímetros, no hay duda: el cinturón con lazada que presenta este modelo plisado para novias es el centro de atención.

A modo de falso chaleco, compartiendo protagonismo cromático con el blanco y adherida al vestido, una pieza en verde decorada con aplicaciones geométricas de cuentas. Precisamente la especialidad de Carmen J Sánchez, que se distingue por salpicar de pedrería y color los trajes que salen de su factoría.

Para no asumir riesgos excesivos, optar por la gama de los empolvados es una buena y sensata idea. Prueba con el lila, uno de esos colores ideales para novias de verano y que ya hemos visto en ramos y zapatos, está vez decorando el escote o las mangas, como puso en práctica esta novia de Maria Amadorr.

Turno para adentrarnos en el universo de los botones. Más allá de los forrados en blanco que suelen decoran espaldas infinitas, hay novias que deciden otorgarles un nuevo rol en sus atuendos con dos máximas: estilo vintage y tamaño XL.

En esta tendencia es igual de importante seleccionar un buen color para esos toques, como combinarlo con el resto de elementos esenciales en todo look nupcial. Atenta a esta idea de la diseñadora Beatriz Álvaro: mangas de tul con pedrería rosa, banda cruzada en el cuerpo confeccionada en el mismo tejido, ramo en esos tonos rosados y hasta la manicura en nude.

Cerramos inspiración con una novia de Teresa Helbig, que solo con ese dato, se sabe que son únicas y especiales. En este caso y echando mano de miles y minúsculos pailettes dorados, la catalana (también en el armario de doña Letizia) creo diferentes formas florales para un resultado final espectacular.

Si algo nos está dejando claro 2022, es que las tendencias de moda nupcial no dejan de evolucionar ni un solo día. Mientras hay novias que han renunciado por completo al vestido para lucir un look con pantalón o un dos piezas de chaqueta y falda, o cómo las más arriesgadas huyen del blanco para teñir sus modelos de rosa empolvado, azul cielo o verde menta, también hemos detectado una nueva corriente en alza. Idónea para mujeres que quieren marcar la diferencia con algún que otro detalle especial, pero no están dispuestas ni a prescindir al vestido, ni del blanco como color principal.

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