3 vestidos de novia virales con capa como adelanto de las tendencias para 2023

Después de meses deleitándonos semana a semana con los vestidos de novia y las bodas más impresionantes de los últimos tiempos, toca mirar al futuro y vislumbrar qué tendencias en moda nupcial nos esperan para 2023. Con el papel del vestido como prenda principal y la confirmación de qué pantalones, faldas y monos quedan relegados a un segundo plano, la capa se consolida como 'must have'.

Son muchas las novias que, a lo largo de 2022, han incluido una capa en su look nupcial, bien como sustituta del tradicional velo, o bien como pieza de abrigo, en el caso de enlaces celebrados en otoño e invierno. Sea como sea, es tendencia y para inspirarte, tres novias virales con capa (y estilos tan diferentes como rompedores) recién salidas del horno digital.

Eugenia y su vestido de Alejandra Oria

Tal y como ha contado la diseñadora Alejandra Oria en su perfil de Instagram, Eugenia es la última novia que salió de su taller este año y es evidente que cierran curso a lo grande.

Para su boda invernal, celebrada en Madrid en pleno diciembre, Eugenia escogió un vestido confeccionado en un tejido grueso bordado con un motivo floral 3D de color blanco roto. Cuello a la caja, manga larga abullonada, puños abotonados, corte debajo del pecho, falda con patrón de línea A y cola. Una auténtica preciosidad.

La novia accesorizó (y con mucho acierto) su atuendo nupcial con unos guantes opera de piel en la misma tonalidad del traje, otro detalle de tendencia a tener en el radar; joyas de estética vintage y un ramo romántico en colores empolvados con un lazo de terciopelo ocre anudando las ramas.

Pero sin por un motivo 'fashion' Eugenia y su vestido de Alejandra Oria están aquí, es por la capa de terciopelo verde que llevaba sobre él.

Fabricada en la parte exterior con un tejido de terciopelo de color verde suave y en el forro, con uno satinado, la capa de Eugenia presentaba el cuello subido, costuras plisadas que desembocan por los hombros, cierre en la espalda, abertura central y una silueta caída con cola.

¿El resultado? Una novia que, sin renunciar a presumir de su estilo el día de su boda, sumó el abrigo necesario diciendo sí a una prenda de moda.

Teresa y su vestido de Valenzuela

La capa que Teresa lució en su gran día es de las más originales que hemos descubierto buceando por las redes sociales. Todo el look nupcial es una impecable creación del atelier Valenzuela, ubicado en el centro de la capital.

Teresa y David se casaron el 29 de octubre en Madrid. Para la ceremonia religiosa, así como para el banquete posterior, la novia no se desprendió de su capa, un híbrido entre crop top y prenda de abrigo que cautiva a simple vista.

Atenta a los detalles: cuello redondo, hombreras arquitectónicas bien marcadas, bordado geométrico con hilos metalizados en su trama, largo cropped, botonadura forrada en la parte trasera y de ahí brota la capa que queda arrastrando por el suelo en sintonía con el vestido y el velo.

Debajo, la diseñadora de Valenzuela ideó un traje drapeado con mangas ceñidas de tul y falda sencilla que, con poco, ayudaron a deslumbrar a Teresa en su enlace.

Un ramo de flores de estética bohemia en tonos granates, azules, blancos y verdes anudado con una cinta, unos pendientes largos de pedrería y su anillo de compromiso fueron los únicos elementos que la novia añadió al estilismo.

Raquel y su vestido de Valzú

La capa de Raquel para su boda en Pontevedra es de otro planeta y, sin duda, la protagonista de su atuendo de novia. Confeccionada y fabricada a medida por Alejandra Valladares, directora creativa y fundadora de la firma Valzú, salta a la vista que es una pieza singular.

Valladares empleó un tejido en tono champán y sobre él, de manera artesanal, se bordaron a contraste, con hilo verde, las diferentes ramas que recorren la pieza, y para las flores, destellos de pedrería.

Atada al cuello mediante unos pequeños botones joya de diseño floral, a la altura de los hombros unas costuras drapeadas daban comienzo a una capa voluminosa. A diferencia de las novias anteriores, Raquel llevó la prenda cerrada, ocultando el vestido, y gracias a dos aberturas, se asomaban los brazos.

De corte lencero y diseño casi pegado al cuerpo, la novia sorprendió al despojarse de la capa y enseñar su vestido: un 'slip dress' moderno con blonda en encaje en el escote y la parte superior de la falda. Prueba de que los vestidos satinados para novias estarán en boga en 2023.

Más rasgos de tendencia. Los manguitos de tul que, de forma sugerente, se deslizaban por los brazos de Raquel.