La boda de Balbisiana, al detalle: rodeada de vips, dos vestidos de novia y en un fincón en Cádiz

Era una de las bodas más esperadas de la temporada por sus ilustres invitados y sus famosas tartas. Paula Babiano, fundadora del imperio Balbisiana, se casaba este 17 de septiembre y su enlace prometía ser un auténtico festival de sus famosos postres, que han conquistado a gran parte de la alta sociedad primero madrileña y luego española. Superó las expectativas.

Celebrada en una finca privada en Cádiz, la novia compaginó la organización de su boda con Ignacio Ortega, de Casa Ortega, con el lanzamiento de su libro y la apertura de varias tiendas (una de ellas en la T4 del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas y otra en la calle Génova). Lo más difícil, tal y como ella nos confesaba en una entrevista esta primavera entre risas, ha sido encontrar el equilibrio para mantener la línea entre pruebas de postres y nuevos productos que ha ido lanzando a lo largo de este año (las tabletas de chocolate han sido otro de sus éxitos).

Todo salió según lo previsto. En plena ola de éxitos de su empresa, que creó poco antes de la pandemia de la nada y que se ha convertido en un imprescindible en fiestas de marcas de lujo y famosas como Paula Ordovás o la modelo Teresa Baca, Paula Babiano se casó con el amor de su vida en la boda de ensueño que siempre soñó.

Ataviada con un elegante vestido firmado por Inés Martín Alcalde, caminó orgullosa y emocionada al altar del brazo de su padre. No arriesgó y fiel a su estilo se decantó por un diseño de corte clásico confeccionado en organza de seda en distintas capas y toda la falda bordada a mano, con escote asimétrico y falda con una caída con movimiento que contaba con una larga cola y combinó con un velo bordado de tul de seda con el que cubrió su rostro durante la ceremonia como manda la tradición.

Un ramo que combinaba flores blancas con largos tallos verdes y un recogido sencillo a media altura (creado por Javier Delgado) que lució hasta la fiesta hicieron el resto. “Estaba guapísima”, han escrito varias amigas suyas en sus perfiles de redes sociales. Del maquillaje se encargó Noelia Cortés, y de las joyas, clásicas y atemporales, Havana Joyeros.

Con este vestido también disfrutó del catering servido por El Mentidero en la finca familiar de la novia (la que fuera la casa de sus abuelos), decorada para la ocasión con mimo y esmero. Contó con la ayuda de una wedding planner de la zona, Los Detalles de Cristina, para facilitar la organización y todo salió según lo previsto.

La zona de la cena fue servida bajo un bajo un manto de luces, mesas italianas llenas de flores de Florenea y una elección de vajilla impecable que gritaba a los cuatro vientos la personalidad de esta novia, de Options. De las fotos se encargó una de las fotógrafas favoritas de la jet, Alejandra Ortiz Photo.

Los guiños a su emporio estaban por todos lados. Hasta en una de las paredes había instalado un toldo igual que el que tiene en sus tiendas, con su característico color azul y sus letras doradas. No obstante, si hubo algo de lo más esperado fue el postre.

La novia, después de darle muchas vueltas, se decantó por poner toda la carne en el asador y deleitar a sus invitados con un auténtico festín, con camareros vestidos de ‘pattisiers’ con chaquetilla blanca que en fila y bailando llenaron las mesas con algunas de sus tartas más famosas.

Además, instalaron una mesa de postres presidida por una noria en la que sus famosas trufas de todos los sabores giraban sin parar. Antes del baile, los novios cortaron una tarta de cinco pisos.

Invitadas vip

Un auténtico festival dulce del que disfrutaron rostros tan conocidos como Paula Ordovás, clienta e íntima amiga de la novia, que lució un vestido de Juan Vidal inspirado en Almudena Grandes.

Tampoco se perdieron el enlace la ex Miss España Carla Barber, la modelo Teresa Baca, la empresaria Mónica Sada o Paola Freire, creadora de la cuenta de Instagram Foodtropia, una de las creadoras de contenido de cocina más seguidas.

Valentina Suárez-Zuloaga, fundadora de ES Fascinante e íntima amiga de Sofía Palazuelo, también se encontraba entre las ilustres invitadas que bailaron en otra zona de la finca hasta el amanecer.

Segundo vestido

Finalizada la cena, y tras bailar con su padre y con su ya marido, Paula abandonó durante un momento a sus invitados para cambiarse de look. Para la fiesta, ambientada por el famoso DJ Mickey Pavón y toda clase de accesorios para los allí presentes, la novia lució un segundo vestido de novia de corte lencero, tirantes y mucho más cómodo para disfrutar al máximo de su gran boda, que combinó con un tocado floral a juego con el que adornó su melena ya suelta.

Una elección mucho más desenfadada y divertida para poner el broche de oro a una noche de ensueño.