Montse Meléndez, ingeniera de alimentos: "Si congelas por más de 24 horas pan, arroz o pasta ya cocida y después lo vuelves a calentar, te ayudará a tu digestión"

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Los alimentos que forman parte de la dieta diaria pueden cambiar su efecto en el organismo según la manera en la que se preparen o conserven. Así lo ha explicado Montse Meléndez, ingeniera de alimentos, que ha querido divulgar de forma sencilla cómo el pan, el arroz o la pasta pueden convertirse en aliados de la microbiota si se siguen unos pasos muy concretos.

Meléndez afirma que “si congelas o refrigeras por más de 24 horas pan, arroz o pasta cocida y después lo vuelves a calentar, ayudarás a tu digestión, aumentarás el contenido de fibra y conseguirás un efecto prebiótico”. La clave está en un fenómeno conocido como retrogradación del almidón, que transforma estos alimentos de una manera inesperada.

El almidón es un carbohidrato presente en cereales, tubérculos, legumbres, frutas y harinas. Cuando cocinamos con agua alimentos como pan, arroz, pasta, patata o avena, el almidón absorbe líquido y su estructura se modifica para facilitar la digestión. Sin embargo, si se dejan enfriar y después se vuelven a calentar, esa estructura cambia de nuevo, haciendo que nuestro organismo no lo pueda descomponer con tanta facilidad.

Este cambio convierte parte del almidón en lo que se denomina almidón resistente, un tipo de fibra dietética que llega intacta al intestino grueso. Allí, la microbiota intestinal lo utiliza como alimento, lo que favorece su crecimiento y tiene un impacto positivo en la salud digestiva.

La especialista recuerda que este tipo de fibra actúa como prebiótico, es decir, alimenta a las bacterias beneficiosas que habitan en el intestino. Mantener una microbiota equilibrada se asocia con mejor digestión, un sistema inmunitario más fuerte y una menor inflamación.

Aunque estos alimentos siguen siendo fuente de carbohidratos, el proceso de enfriado y recalentado permite que parte de ese almidón deje de comportarse como un azúcar de rápida absorción y pase a funcionar como fibra. Esto puede resultar útil para quienes buscan mejorar la salud intestinal o controlar picos de glucosa.