Magdalena de Suecia, una princesa y futura mamá trabajadora a un mes de dar a luz

A pesar de encontrarse en la recta final de su embarazo, Magdalena de Suecia continúa trabajando en World Childhood, la fundación creada y presidida por su madre, la reina Silvia. Muy activa en las redes sociales, Magdalena compartió este domingo en su perfil de Facebook una fotografía en la que se la puede ver en una reunión de la asociación y mostrando su tripa de ocho meses en la que apoya sus manos. “Estupendas reuniones esta semana. ¡Emocionantes planes para Childhood en 2014!, escribió junto a la instantánea.

El nacimiento del primer hijo de Magdalena y su marido, Chris O’Neil, que han confirmado que será una niña, está previsto para finales del mes de febrero en Nueva York, ciudad en la que residen. Sólo tres meses después de contraer matrimonioel 8 de junio en la Capilla del Palacio Real de Estocolmo, la Casa Real sueca anunció, a través de un comunicado, que la hija menor del rey Carlos Gustavo estaba en su primer trimestre de gestación.Paralelamente, la futura mamá hacía partícipes a todos sus seguidores de Facebook de la buena nueva a través de un comentario: "Chris y yo estamos encantados de comunicaros que estamos esperando un bebé. Nos sentimos muy bendecidos y estamos emocionados con la idea de ser padres", escribió. Desde entonces, no ha descuidado sus compromisos con la fundación ni con la Casa Real a pesar de la distancia.

Muy querida y respetada en Suecia, Magdalena no dudó en protagonizar el pasado mes de noviembre la portada de la revista ELLE. Sus apariciones en las revistas de moda es algo muy habitual en ella, sobre todo después de ser considerada como la princesa más bella de entre todas las europeas.

En el interior, Magdalena reveló que se quedó embaraza sin tenerlo planificado. “Estamos muy felices y contentos aunque sucedió un poco rápido y de una manera muy repentina. Pero es mejor así que planificar todo a largo plazo y que luego no suceda nada”. Como muchas embarazadas, Magdalena ha tenido algunos antojos como el queso, con el que se ha dado “algún que otro atracón”.