Estudiante y excanterano del Madrid: así es Gonzalo Caballero

Gonzalo Caballero sigue ingresado después de que este sábado sufriera una cogida en la plaza de toros de Las Ventas por un toro de la ganadería de Valdefresno. El gran amigo de Victoria Federica fue volteado y sufrió una herida de dos trayectorias en el muslo izquierdo, que seccionó la vena femoral y las ramas colaterales.

En primera instancia fue operado en la enfermería por el doctor Máximo García Padrós y posteriormente fue trasladado al hospital Francisco de Asís de Madrid, donde se sometió a otra cirugía que duró sobre unas tres horas. En este momento continúa su recuperación.

Del fútbol al toreo

Gonzalo Caballero es el mediano de tres hermanos de una familia en la que nunca antes había habido una vinculación con el mundo del toro. Él es, al menos por el momento, el primer y único torero en el árbol genealógico familiar.

La decisión la tomó una tarde en la que vio torear a José Tomás, en la plaza de Linares. Gonzalo tenía 16 años y hasta entonces era un apasionado del fútbol, deporte para el que no le faltaban cualidades; no en vano, tras pasar unas pruebas y ser seleccionado, estuvo tres años entrenando con la cantera del Real Madrid, pese a que él es colchonero, al igual que lo era su padre, quien falleció en abril de 2017, con 52 años al no poder superar un cáncer.

Su pérdida significó un duro golpe para Gonzalo, ya que estaba muy unido a él, la persona de quien heredó la afición por la Fiesta. Asimismo su madre, Chiqui de la Hoya, es también aficionada a los toros, en tanto que sus dos hermanos se mueven en otros terrenos sin dejar de apoyar a Gonzalo. Así, Ricardo -el mayor- es diseñador gráfico, en tanto que Virginia -la menor de los tres- está intentando abrirse paso en el mundo de la moda como diseñadora.

Gonzalo Caballero entró en la Escuela Taurina de Madrid, en 2007, con 16 años cumplidos. En septiembre de 2010 hizo su presentación en público, en un festejo sin picadores. Pero no sería hasta la temporada de 2012 cuando su nombre, siendo aún un incipiente novillero, comenzó a oírse por los mentideros taurinos. Fue un triunfo logrado en la tarde de su presentación en La Maestranza de Sevilla lo que le hizo generar buenas expectativas entre los aficionados. Después, en el mes de mayo, sumó otro importante éxito, esta vez en la Monumental de Las Ventas, y en julio, en los sanfermines de aquel año, cortó dos orejas antes de sufrir una cogida. Tras aquellos primeros paseíllos en el escalafón inferior, le vino un parón -algo que a veces les sucede a los toreros en distintos momentos de sus trayectorias profesionales-.

Entre Madrid y Sevilla

Entonces, Gonzalo Caballero aprovechó para aprobar la Selectividad y matricularse en Ingeniería Informática, carrera que actualmente ha dejado al margen para poder centrarse única y exclusivamente en su profesión de torero. El diestro vive entre Madrid, donde se encuentran su madre y hermanos, y una localidad del Aljarafe sevillano, donde pasa los inviernos haciendo vida de torero. Allí entrena a diario junto a su peón de confianza, Curro Robles, y desde allí parte para acudir a los tentaderos en los que participa, bien en la provincia de Sevilla, bien en tierras charras, o bien en la sierra madrileña.

Gonzalo Caballero tomó la alternativa en la Monumental de Las Ventas, plaza donde solo la toman los 'elegidos'. Fue la tarde del 3 de octubre de 2015, en la Feria de Otoño capitalina. Gonzalo no estaba anunciado inicialmente en los carteles del ciclo otoñal madrileño. Sin embargo, quiso el destino que su amigo y compañero Alberto López Simón -por entonces en la cima del escalafón- resultará cogido la víspera de estar anunciado en Madrid. Así las cosas, el empresario de Las Ventas, por deseo de López Simón, le llamó para proponerle tomar la alternativa al día siguiente. Sin dudarlo, Gonzalo Caballero dijo que sí.

Desde entonces hasta ahora, ha sumado un número prudente de paseíllos, en todos se ha visto arropado por un grupo de amigos y seguidores leales que le apoyan de manera incondicional en esas tardes de tanta responsabilidad. Incluso cuando ha sentido la necesidad de reivindicar un mejor tratamiento por parte de los actuales gestores de la plaza de Las Ventas, lo ha hecho teniendo a su lado a sus amigos más próximos, entre ellos, a Felipe Froilán.

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Recordemos el día que en Las Ventas, el diestro recogió un premio en agradecimiento a su solidaridad, al haberse encerrado en solitario en la plaza de Torrejón de Ardoz con el fin de recaudar fondos para una asociación de niños con cáncer. Aquel día, en el que se hacían públicas las combinaciones de la Feria de San Isidro 2018, en presencia del Rey emérito, Don Juan Carlos, Gonzalo Caballero, dolido por no haber sido incluido su nombre en las mismas, reprochó con valentía y serenidad al empresario Simón Casas el que en esta feria no hubiera contado con él, más habiendo sido él, precisamente, el ganador del Trofeo a la Mejor Estocada de San Isidro 2017.

“Prefiero morir luchando por la libertad de mis manoletinas que ser preso todos los días de mi verdad”, dijo ante un atril de un gran escenario montado para la ocasión, momentos antes de devolver el citado galardón. Cuando terminó su discurso, los presentes, entre ellos su amigo Felipe Froilán, rompieron en una cerrada ovación.