El plan secreto de Kate Middleton con sus hijos: un almuerzo de fish and chips a la orilla del mar

A pesar de que sus apariciones públicas han sido contadas desde que revelara al mundo que tiene cáncer, Kate Middleton intenta llevar una vida lo más normal posible, sobre todo para que sus hijos pasen este periodo de una forma no traumática. De ahí que la princesa de Gales organice numerosos planes privados con sus pequeños. Ahora se ha conocido que, antes de poner rumbo a Balmoral, en Escocia, donde están pasando unos días de vacaciones junto a Carlos III y Camila, Kate se llevó a sus hijos a almorzar fish and chips.

Aunque residen en Adelaide Cottage, cerca de Windsor, los príncipes de Gales tienen otra casa en el condado de Norfolk, Anmer Hall, que reformaron a su gusto cuando la reina Isabel II decidió regalársela con motivo de su enlace matrimonial. Allí han pasado Guillermo, Kate y sus hijos la mayor parte del verano, por lo que la princesa decidió hacer un plan con George, Charlotte y Louis, llevándolos a comer el plato típico de Reino Unido: el fish and chips.

Kate y sus hijos disfrutaron del pescado y las patatas fritas en el local Eric's Fish and Chip Shop, ubicado en Thornham, Norfolk. Según testigos presenciales, la princesa y sus tres retoños actuaron con tanta normalidad que al principio les costó reconocerlos. Iban vestidos de manera informal y se comportaban como una familia más pasando un día en la costa.

"Me quedé atónito cuando llegué a Eric's en Thornham y vi a Kate y a los niños. Hemos sido clientes habituales de Eric's durante un tiempo, por lo que es fantástico ver que se corre la voz sobre lo maravilloso que es. ¡Ahora es oficialmente 'apto para un miembro de la realeza'!", confesaba uno de los testigos a 'Hello'.

El fish & chips es un plato que triunfa entre los miembros de la familia real británica. También la reina Camila es muy fan, como reveló a la revista 'You', cuando le preguntaron por su comida favorita: "Pescado y patatas fritas recién hechas, envueltas en papel. Ese olor. No hay nada mejor que un buen Fish and Chips".

No es este el único plan del que disfrutaron Kate y sus hijos durante su estancia en Anmer Hall. Hace unas semanas, la familia al completo se presentó por sorpresa en una batalla tradicional en Norfolk que tiene lugar con pistolas Nerf. El príncipe Georg la princesa Charlotte y el príncipe Louis participaron como niños anónimos en el Festival Gone Wild en Holkham Hall, donde se enfrentaron en una batalla Nerf "de alta intensidad con pistolas de juguete y bombas de humo", como ha publicado la prensa británica.

Tal y como revela la prensa local, que ha recogido los testimonios de los vecinos que participaron con la familia en la batalla, el que mejor se lo pasó fue el pequeño Louis, que corría emocionado por todos lados gritando "¡Nerf o nada, hagámoslo!". La jefa de Norfolk Nerf Parties, Georgina Barron, ha revelado también que Kate Middleton, que ha estado luchando contra el cáncer, incluso "agarró una pistola Nerf, corrió y jugó atrapada en el barro con sus hijos". Recibir a la familia fue el "mayor honor" y todos pasaron un día "inolvidable".

Tras su estancia en Anmer Hall, los Gales pusieron rumbo al castillo de Balmoral, donde este fin de semana fueron fotografiados acudiendo a misa en Crathie Kirk.