El regreso del mono más abstracto de Máxima de Holanda: aberturas en seda cady y joyas de kunzitas

Como cada año, la primera semana de octubre se presenta especialmente intensa para Máxima de Holanda. En esta ocasión, su agenda oficial ha estado repleta de compromisos, al igual que el año pasado, lo que la ha llevado a adaptar cuidadosamente su vestuario a cada evento. Una vez más, ha demostrado su habilidad para combinar elegancia y funcionalidad, consolidando la versatilidad como su mejor aliada. Durante las actividades diurnas ha optado por conjuntos sofisticados y de líneas limpias, mientras que en los compromisos nocturnos ha deslumbrado con vestidos más elaborados, algunos incluso adornados con plumas, reflejando su característico estilo refinado.

Gracias a esta habilidad, Máxima de Holanda ha participado en uno de los eventos más significativos para ella: la entrega de los Appeltjes van Oranje, premios concedidos por el Fondo Oranje. Estos galardones, representados por una estatua de bronce diseñada por la princesa Beatriz, se otorgan cada año a tres proyectos o iniciativas vinculadas con un tema específico. En esta edición, la temática ha girado en torno al poder de las iniciativas sociales. Los once nominados fueron recibidos por la reina en el palacio de Noordeinde, donde anunció a los ganadores, quienes además recibirán 25.000 euros para fortalecer sus proyectos.

La ocasión fue el escenario ideal para que Máxima luciera por primera vez un mono de Elie Saab que hasta ahora solo había llevado en un evento solidario en memoria de Marianna Vardinogiannis, gran amiga de la familia real. La prenda, confeccionada en seda cady de tono nude, destaca por su elegancia y delicadeza. Presenta un cuello camisero, bolsillos exteriores en el pecho, perneras acampanadas y una cintura ajustada que realza la figura. Además, las aberturas abstractas en los puños de las mangas de tipo obispo añaden un sutil toque de originalidad a esta silueta clásica y sofisticada.

En lo referente a los accesorios, Máxima abrió su joyero para escoger varias piezas de kunzitas y diamantes. Destacó un imponente collar, adaptable también como broche, acompañado por unos pendientes a juego que ya había lucido en 2011, cuando aún era princesa. En sus manos llevó su anillo de compromiso de diamantes junto con una elegante doble pulsera. Completó el conjunto con un clutch en tono claro, que armonizaba a la perfección con el mono y aportaba un toque final de sutileza y coherencia a su estilismo.

Al evento también asistieron el rey Guillermo y la princesa Beatriz, quien eligió un estilo completamente distinto al de su nuera. Para la ocasión, lució una chaqueta con estampado floral y líneas negras con cuello redondo, que combinó con un pantalón negro y un bolso de hombro acolchado, logrando un conjunto elegante y distinguido, pero de marcado contraste con el look de la reina.

Mientras se desarrollaba el acto, la Casa Real holandesa emitió un comunicado importante: “Pien Zaaijer, mano derecha de los reyes desde 2002, se jubilará el próximo año”, informaron. Su reemplazo será Inge Dovermann, quien asumirá el cargo a partir del 1 de enero. Dovermann cuenta con amplia experiencia en el ayuntamiento de Maastricht, en la provincia de Limburgo y en el Ministerio del Interior y de la Realeza. La noticia se dio a conocer mientras la reina brillaba en la entrega de los Appeltjes van Oranje, demostrando una vez más su elegancia y compromiso en actos de gran relevancia social.