'Couch Surfing' o cómo viajar de sofá en sofá
Su lema es claro: promover la generosidad y el intercambio cultural. Esa es la filosofía de Couch Surfing, una iniciativa basada en una red social que
Su lema es claro: promover la generosidad y el intercambio cultural. Esa es la filosofía de Couch Surfing, una iniciativa basada en una red social que nació en 2003 para poder viajar por el mundo durmiendo en sofás extranjeros.
El turista debe apuntarse en la página web de Couch Surfing para poder contactar con más de un millón de personas de todo el mundo que, con mucho gusto, donan de manera gratuita por unos días su confortable sofá a los visitantes.
“Mi experiencia fue mucho mejor de lo que esperaba. Me dieron un sofá, me presentaron a sus amigos y me llevaron a algunos de los lugares más increíbles de la noche madrileña”, escribió Kevin en la página web, un neoyorkino que pasó en Madrid unos días. “Incluso conseguí mejorar mi español en dos días”, concluye en su referencia.
Desde su portal quieren destacar que no es una forma de viajar insegura. Couch Surfing permite conocer de antemano quién es el casero e incluso el color del sofá donde dormirá el turista. Los usuarios escriben evaluaciones, para así frenar el sentimiento de incertidumbre que todo viajero experimenta antes de coger sus maletas y embarcarse a lo desconocido.
Impulsar el intercambio cultural
Couch Surfing no solo busca que el turista duerma gratis allá donde vaya, sino que pretende crear un vínculo de amistad entre el arrendador y el visitante durante la estancia.
"Fui a Brujas con mi madre y nos quedamos en la casa de un profesor de inglés", cuenta a Vanitatis Ana, una estudiante de biología que viajó este verano a Bélgica. "Nos trató muy bien. Nos invitó a cenar a su casa, nos marcó en el plano los lugares que no nos podíamos perder de la ciudad e incluso nos dejó en su casa a las dos solas durante una mañana".
Además, Couch Surfing va un paso por delante ya que también permite conocer a los turistas que están visitando una ciudad determinada y poder tomar un café o dar un paseo con ellos.
Sin duda, una buena opción para conocer los rincones de todo mundo en los tiempos que corren.
Su lema es claro: promover la generosidad y el intercambio cultural. Esa es la filosofía de Couch Surfing, una iniciativa basada en una red social que nació en 2003 para poder viajar por el mundo durmiendo en sofás extranjeros.