Isabel Pantoja: de tener a la reina Sofía como fan a saltar en helicóptero en 'Supervivientes'

Si hay una celebrity que encarna el significado del término 'resurrección', esa es Isabel Pantoja. Nadie puede negar que ha atravesado diversos 'vía crucis', pero siempre ha sabido levantarse y seguir como si nada hubiera pasado. Hace casi un cuarto de siglo que realizaba una queja existencial, a través de la inspiración de José Luis Perales, en la que, a día de hoy, sigue siendo una de sus canciones más celebradas, casi una oda a la resiliencia: "Hoy quiero confesar que estoy algo cansada de llevar esta estrella que pesa tanto".

La artista ignoraba entonces que la vida aún le tenía preparados algunos trances que parecían obra de un perverso guionista. Aún así, como Madonna, la mujer que acuñó la 'reinvención'', ha sabido siempre encontrar la respuesta a los retos que le han puesto delante. Por eso, cuando fue a recibir a su hijo Kiko en 'GH Dúo', sus palabras vaticinando que hará un buen papel en 'Supervivientes' rezumaban tanta credibilidad. Ahora que llega el momento de la verdad tendremos la oportunidad de comprobar si, como ella misma adelantó, lo bien amueblada que dice tener la cabeza prevalece para que haga un papel a la altura de las expectativas.

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El 26 de septiembre de 1984, España se quedó paralizada por la tragedia de la plaza de Pozoblanco en Córdoba, cuando un astado de nombre Avispado le quitaba la vida a Francisco Rivera, Paquirri (nombre artístico que ostenta ahora su hijo mayor, Fran Rivera). Nos conmocionaron entonces las desgarradoras imágenes de una mujer que se quedaba viuda con un bebé de menos de un año y que a partir de ese momento se encerraba a cal y canto para vivir un luto que quedó plasmado más adelante en una de las portadas más vendidas de la historia de la revista '¡Hola!'.

Un reportaje por una elevada suma de dinero que, al parecer, incluía una cláusula de silencio y en el que aparecía en una serie de estampas costumbristas con su "pequeño del alma", a quien entonces se llamaba Paquirrín y que acabaría convertido en Kiko Rivera, DJ. Ahora, además, defensor en plató de su madre en su nueva andadura profesional (una figura que lleva años ejerciendo su sobrina Anabel Pantoja en 'Sálvame').

La tonadillera, que según algunas publicaciones se había planteado seriamente la retirada de los escenarios para dedicarse a su vida familiar, volvía al estudio de grabación unos meses después de perder al que parece ha sido el gran amor de su vida para interpretar las 10 canciones que para ella compuso el mencionado cantautor conquense en 'Marinero de luces'.

Un disco que veía la luz en los estertores del otoño de 1985 y del que se compraron solo en España un millón de copias, lo que le convertía en el más vendido de este género en nuestro país. "Es un memorial de ausencias, un manual de instrucciones para llorar, el patético retrato de una mujer rota por el dolor que espera en la ventana teñida de melancolía y recuerdos", escribía en su crítica Ricardo Cantalapiedra en 'El País'.

Una cita para la historia

La ansiada vuelta de Isabel tuvo la dimensión de un fenómeno sociológico, lo que explica que fuera recibida en audiencia por los reyes Juan Carlos y Sofía el 31 de octubre de ese año en el Palacio de la Zarzuela, pues ya se estaba preparando un concierto a beneficio de la Fundación Reina Sofía, que tendría lugar el 4 de diciembre en el Teatro Lope de Vega de Madrid. Un espectáculo musical que sería emitido por TVE con gran éxito de audiencia, en una época en la que las televisiones privadas no habían irrumpido en el mercado audiovisual e internet era casi ciencia ficción.

Por supuesto, en un palco de honor estaba la reina Sofía, convertida en ese momento en la fan de mayor rango a la que podía aspirar la tonadillera. Acompañada por la duquesa de Calabria, la madre del actual rey Felipe VI presenció un recital que, según los cronistas de la época, comenzaba con una Isabel algo atenazada por los nervios y que se fue creciendo conforme su más que notable garganta iba entrando en calor.

Un concierto que tuvo uno de sus momentos cumbre y de mayor empatía por parte del público cuando el propio Kiko Rivera hacía su debut en los escenarios entonando unas palabras de la mencionada 'Mi pequeño del alma'. Una jugada similar que repetiría su hermana Chabelita muchos años más tarde, pero en su caso cantando el mucho más festivo y aséptico emocionalmente 'Aserejé' de Las Ketchup.

Comenzaba entonces una irresistible ascensión de Isabel Pantoja, que desplegaba una brillante carrera tanto en España como en América, donde se vivió con estupor cómo en febrero del año pasado se canceló su última gira por problemas con el visado. Ya tenía gran parte de los aforos vendidos tanto en Miami como en Puerto Rico, donde, como todos los que tengan una memoria televisiva 'freak' saben, cuenta con un imitador a quien se conoce con el sobrenombre de la Pantoja de Puerto Rico y que logró una gran difusión gracias al programa 'Crónicas marcianas'. Ni que decir tiene que un buen baremo para medir la popularidad es el número de imitadores o la capacidad de generar 'virales' lingüísticos, como es el caso de Isabel, artífice de los tan repetidos 'Estoy cansada de la familia Rivera', 'No tienes vida, pues cómprate una vida' o 'Todo esto es mi ca-sa'.

​La pesadilla tras Julián Muñoz

Esta anulación de gira, dolorosa para la artista y sus admiradores, estaba estrictamente relacionado con uno de los episodios más devastadores de su vida: su paso por prisión, tras su controvertida relación sentimental con el que fuera alcalde de Marbella, Julián Muñoz. Un asunto sobre el que la artista no se ha pronunciado jamás, ni siquiera en la última exclusiva concedida a '¡Hola!', que se ceñía a su nuevo y arriesgado reto en 'Supervivientes'.

Decimos arriesgado porque el mencionado reality de Tele 5 supone una exposición sin cortapisas de los personajes que participan en él y que les somete a una gran presión física y psíquica (veremos cómo le afecta la ausencia de nicotina, pues Pantoja es una fumadora confesa). También porque ignoramos cómo podría responder su público ante este movimiento profesional que nadie se esperaba, que podría estar motivado por la delicada situación financiera que supuestamente atraviesa por los embargos que pesan sobre Cantora. Eso sí, la expectación es máxima por verla saltar del helicóptero en lo que puede interpretarse también como un rito iniciático en un género en el que se han prodigado un gran número de personajes en nómina en Mediaset, como por ejemplo las Campos, protagonistas de su propio reality, o colaboradores como Mila Ximénez, en su día némesis de la estrella, y Chelo García Cortés, devenida ahora contrincante en un formato en el que 'solo puede quedar uno'.

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Isabel Pantoja es posiblemente uno de los personajes sobre los que más desinformación hay, lo que ha contribuido también a agrandar su leyenda. Decimos bien, desinformación, porque se ha convertido en un clásico en los últimos años dar credibilidad a los denominados 'topos de Cantora', que en muchos casos han filtrado rumores que estaban lejos de ser reales y porque ella misma ha sabido dosificar muy bien sus silencios, por ejemplo, para negociar su vuelta a televisión. La tonadillera, además, ha demostrado que no le ha temblado el pulso a lo largo de su carrera para poner demandas a aquellos que la han difamado y tiene todo un historial de victorias judiciales en ese sentido.

Como todo lo que rodea a la intérprete de 'Se me enamora el alma' o 'Garlochí', llega a 'Supervivientes' rodeada de un halo de misterio sobre un contrato millonario firmado con Mediaset cuyas cifras y cláusulas seguramente solo conocen su entorno y Paolo Vasile, consejero delegado del poderoso grupo mediático a quien se ha vuelto a vincular después de la fallida relación anterior, que la llevó a presentar las Campanadas con Jorge Javier Vázquez en 2012 y que se rompió después de que llamara por teléfono a 'Espejo público' en febrero de ese recién estrenado año en pleno fragor mediático por el caso Malaya.

​Sigue estando aquí

También están en el aire diversos proyectos como ser coach en el talent show 'Idol Kids', pero, ya decimos, siempre nos movemos en el terreno de la especulación. En el aire está una hipotética gira de conciertos e incluso una serie de televisión biográfica autorizada, nada que ver con 'Mi gitana', que emitió Tele 5 en 2012 con shares que rondaban el 20% y que acabó en una batalla en los tribunales, que fallaron a favor de la cantante e impidieron que pueda volverse a emitir o comercializarse.

Dicho lo cual, solo podemos concluir este artículo como ella comenzaba su concierto en Aranjuez en noviembre de 2016. Aquel día, con el teatro abarrotado, asistimos a su segunda resurrección artística, bajo el ala protectora de las canciones de su gran y recordado amigo Juan Gabriel, después de haber cumplido su condena en la prisión sevillana de Alcalá de Guadaíra. Se abiró el telón, emergió Isabel vestida de blanco con un vestido de clara inspiración mexicana y se produjo la catarsis cuando cantó: "Sigo estando aquí".