Begoña Vargas fuera del plató: bailes virales, solidaria y llena de proyectos

Ha nacido una estrella; bueno, hace 21 años que nació esa estrella. De nombre Begoña y de apellido Vargas, seguro que no es la primera que escuchas hablar de esta madrileña. Lo tiene todo para triunfar y todo apunta que así será. Es actriz, modelo, bailarina e influencer, sus seguidores de Instagram aumentan a diario como la espuma, sus looks son de los más perseguidos y sus bailes virales. Con esta carta de presentación no es difícil vaticinar que Begoña Vargas es la nueva artista patria a seguir.

Su boom mediático ha terminado de explotar gracias a 'Las leyes de la frontera', la última película de Daniel Monzón que Vargas protagoniza junto a otros dos jóvenes actores, Marcos Ruiz y Chechu Salgado, y que narra la vida de una banda de delincuentes en la década de los 70, todo un homenaje al cine 'quinqui'.

Natural de Madrid, con 10 años comenzó sus estudios de danza moderna en la Escuela Municipal de Música, Teatro y Danza de Loeches (Madrid), y más tarde se formó como actriz asistiendo a cursos de interpretación. Desde bien niña sus padres vieron que Begoña Vargas apuntaba maneras e incluso ella misma ha confesado en una reciente entrevista que admitieron que "había algo artístico dentro de ella". Con el apoyo de su familia, la única petición fue que "luchase hasta dejarme la piel" y así ha sido. Hoy su nombre comienza a resonar entre la nueva cantera de jóvenes actores españoles.

A sus 21 años puede presumir de haber participado en series de éxito, 'La otra mirada' o 'Alta mar', protagonizar también películas como 'Malasaña 32' y mirar al futuro con perspectiva gracias a sus próximos proyectos, la segunda temporada de 'Paraíso' o 'Bienvenidos a Edén', de Netflix. De momento, "he aprendido un montón y hacer cosas tan distintas y empezar tan joven me han hecho entender este trabajo y amarlo más de lo que ya lo amaba", ha contado la actriz.

Eso como actriz, que como modelo, bailarina e influencer, la cosa tampoco le va mal. Las marcas comienzan a rifársela y ha colaborado con Calvin Klein, Pantene o High Spirits como un reclamo seguro. Así lo constatan sus más de 400.000 seguidores en Instagram. Uno de sus puntos fuertes son sus bailes. Coreografías modernas que combinan ritmo y sensualidad a partes iguales y que han conseguido cautivar a las redes sociales hasta el punto de llegar a ser virales.

El más sonado fue el que protagonizó junto al que hasta ahora había sido su pareja sentimental de los últimos tres años, el también actor Óscar Casas, hermano de Mario Casas. La repercusión de ese vídeo bailando juntos una canción de reguetón en una boda alcanzó cotas nunca vistas y los por aquel entonces novios saltaron a la fama. De ese momentazo han pasado ya dos años y una ruptura de por medio sin que ninguno de los dos jóvenes aclare el porqué de su separación.

Ya como exoficial del clan Casas, Begoña Vargas vive centrada en su carrera y tiene ganas de comerse el mundo, "Quiero trabajar mucho, quiero hacer muchos personajes y quiero trabajar fuera de España, tengo muchas motivaciones y ahora estoy pensando en mí", ha declarado hace solo unos días.

Amante de la naturaleza y el mar, practica surf y es una apasionada de los animales, tiene una perra que llama Nala. La actriz también esconde un lado solidario y colabora con la Asociación Índigo, que se ocupa de niños huérfanos en una isla de Kenia, la cual les proporciona educación y cuidados. Además, apadrinó en su casa a una niña de dicha asociación llamada Emily.