La entrevista más polémica de Tita Cervera: ¿revancha o verdad de una paternidad?

Hasta ahora, Carmen Cervera nos tenía acostumbrados a que sus entrevistas siempre tuvieran un titular llamativo. Unas veces arremetía contra Hacienda por no reconocer su labor filantrópica, otras con los consecutivos ministros de Cultura que no eran capaces de negociar el alquiler de su colección privada.

Incluso llegó a enfrentarse con Ruiz-Gallardón cuando era alcalde en 2006. El motivo era la eliminación de unos árboles y zona verde en el paseo del Prado cerca del museo Thyssen. La baronesa organizó una campaña contra esa decisión que tuvo repercusión en toda la prensa nacional. La imagen de Tita vestida de Chanel encadenada a uno de los árboles y clamando ante la prensa convocada al grito de '¡no a la tala, no a la tala!' se convirtió en el mejor titular para los medios de ese año. Sin embargo, no consiguió que varias de las especies centenarias desaparecieran. El estudio medioambiental recomendaba su eliminación por peligro para los ciudadanos.

Unidos a estas reivindicaciones ciudadanas y ecologistas que tuvieron sus adeptos estaban sus desencuentros con su hijo Borja y su nuera, Blanca Cuesta. Las desavenencias llegaron hasta los tribunales. Demandas varias y acusaciones muy graves que cada parte consideraba legítimas y que el tiempo fue suavizando. Una especie de noria emocional donde unas veces funcionaba el amor filial y otras sus relaciones afectivas desaparecían.

Borja Thyssen no era muy dado a exponer públicamente esos líos familiares y se dedicaba a su familia, que iba aumentando con los años. Tienen cinco hijos y una vida feliz. Y aparentemente, en la actualidad parecía que mantenía una buena relación con su madre. Como ejemplo de esta unidad, la noche del 24 de diciembre los Thyssen Cuesta se reencontraron en Andorra con la baronesa. Hubo una cena familiar presidida por la anfitriona Tita, el sobrino Guillermo y su mujer, y las mellizas Carmen y Sabina.

Las niñas, que se encuentran en plena adolescencia, se han convertido en el foco de atención de la entrevista que Risto Mejide le hizo a la baronesa en su programa 'Viajando con Chester' de Cuatro. Una entrevista coordinada por Guillermo Cervera, sobrino y persona de confianza de la baronesa, que se realizó a finales del mes de septiembre en el museo Carmen Cervera de Málaga. No había restricciones para las preguntas ni vetos relacionados con temas polémicos. La baronesa abrió su armario emocional y respondió lo que consideró oportuno. Hubo tiempo suficiente para editar la entrevista y, por lo tanto, para que no hubiera sorpresas.

Una pregunta sorprendente sirvió como cebo previo a la emisión del programa y abrió el debate mediático. Risto le decía a su invitada: "¿El padre de tus niñas es Borja Thyssen?". La respuesta de la baronesa era muy sutil: "Las niñas tienen un padre".

De esta manera, Tita Cervera abría una puerta que, hasta ese momento, estaba cerrada públicamente por ella misma. No así en la intimidad, donde la paternidad de las gemelas forma parte de la información familiar. Carmen y Sabina nacieron en Los Ángeles a través de maternidad subrogada y convirtieron a la baronesa en madre de nuevo a los 63 años. Borja Thyssen se mantuvo al margen de esa decisión. Se casó con Blanca y formó su propia familia sin apenas relación con las que eran sus hermanas legalmente al haberlas adoptado la baronesa.

Hasta aquí la primera parte de esta especie de novela por fascículos con protagonistas visibles y ocultos. Y, de pronto, la historia da un vuelco con la pregunta sobre la filiación de Risto Mejide y la respuesta enigmática de Carmen Cervera. Lo que se esperaba que tuviera un desarrollo y una explicación más amplia en el programa no lo tuvo. A pesar de estar editada la entrevista, de convertir la supuesta paternidad de las menores en tema principal de la entrevista, finalmente se eliminó.

Borja Thyssen no estaba al tanto de la información que había pactado su madre. Se enteró de que su nombre aparecía a través de la promoción del programa. Y reaccionó. Primero muy enfadado con su madre por hablar de las menores y después a través de su abogado, que sugirió a la productora que lo mejor era eliminar la cuestión tan peliaguda.

Lo que sorprende es que haya sido la baronesa la que ha convertido un rumor en un tema de actualidad donde los protagonistas son sus tres hijos. Aseguran los que la conocen que no hay necesidad de abrir ese melón.