El retrato más personal de Javier Cámara: de sus hijos mellizos a los orígenes artísticos de su familia

Aunque la filmografía de Javier Cámara es una de las más prolíficas y exitosas de nuestro país, el intérprete es mucho más reacio a que sepamos más sobre su faceta personal. Aun así, hay algunos datos que sí sabemos sobre cómo es la vida de un actor que es capaz de meterse en la piel de quien se le presente en un guion.

Si bien es cierto que se desconoce si tiene pareja o no, sí se sabe que es padre de dos mellizos que tuvo por gestación subrogada, desde que hace seis años viajara a Estados Unidos para tener a sus hijos por un vientre de alquiler. Por eso, en un año en que este tema ha estado en boca de muchos con casos como el de Ana Obregón con su nieta, Javier se pronunció en primera persona sobre su experiencia personal.

"Yo tengo solo mi historia y la de gente que conozco. Y mi experiencia ha sido mágica, maravillosa, y solo me puede la emoción", recogía 'La Vanguardia' de una entrevista en que el actor manifestaba su vivencia respecto a este tipo de paternidad.

Pero antes de que los asuntos personales de su vida fueran de interés, Cámara se labró una importante carrera en que, a priori, nada ni nadie se le ha resistido. Saltó a la fama nacional con su participación en '¡Ay, señor, señor', ha hecho proyectos internacionales como 'Narcos' y es ganador de dos premios Goya.

En resumidas cuentas, la vida profesional de Javier Cámara tiene muchos triunfos. Es uno de los actores más reconocidos de la industria, pero su parte más personal la guarda única y exclusivamente para él. Pero antes de hablar sobre sus primeros trabajos, repasemos un poco su biografía. Javier Cámara nació en Albelda de Iregua, en La Rioja, en el año 1967. Su familia ha estado vinculada al sector de la agricultura, pero también tienen una faceta muy artística.

Algo que ha destacado en alguna ocasión el actor en entrevistas, como la que hizo para el 'Heraldo'. "Mi padre cantaba y tocaba el saxofón y mis hermanas, la guitarra. Mis tías siempre han cantado jotas. Siempre ha habido una celebración de lo artístico", explicaba el intérprete.

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Cámara también ha reconocido que, cuando era joven, no era buen estudiante y llegó a repetir curso. Sin embargo, fue cuando un profesor de instituto le recomendó dedicarse a la interpretación.

"Fui un chaval de la última fila de la clase desde los diez años. Fernando, mi profesor de Historia en la Laboral, me invitó a unirme a las clases de teatro", recordaba el actor en una entrevista para la cadena SER.

Otra cosa que le dijo su profesor fue que se mudase a la capital a probar suerte con el teatro, ya que, si no lo hacía, "me quedaría en el campo trabajando con mi padre". Así lo dijo en la entrevista a la SER, y confesó que llegó "con una maleta y una caja llena de chorizos que me había dado mi madre".

Sus primeros años en la ciudad fueron como estudiante en la Real Escuela de Arte Dramático de Madrid. Mientras los realizaba, trabajó como acomodador de cine. Lo hizo para pagarse la carrera. En una entrevista a RTVE, admitió que mantiene buenos recuerdos de esa etapa. "Fue un trabajo maravilloso, estaba en la escuela de arte dramático por la mañana haciendo los sueños, y luego veía la realidad de sacar adelante una función de teatro, la dificultad que eso conllevaba", señalaba.

Además de acomodador de cine, Javier Cámara ha sido camarero, ha trabajado con su padre en el campo y ha admitido que hasta los 14 años no pudo ver el mar. En la actualidad, el riojano es uno de los actores más aclamados del sector y tiene en sus manos dos premios Goya.

A pesar de ser discreto con su vida personal, muchas veces ha hablado de su etapa más joven sin ningún problema, abordando temas como el bullying, un problema que sufrió en su adolescencia. Ahora, ese niño que nació en La Rioja se ha convertido en un personaje reconocido dentro y fuera de nuestras fronteras.