¿Cuánto cuesta una boda real? ¿Cuánto genera? ¿Es rentable?
Toda una generación de príncipes casaderos se despide de la soltería con la boda de Guillermo y Kate Middleton. Una generación que nada tiene que ver
Toda una generación de príncipes casaderos se despide de la soltería con la boda de Guillermo y Kate Middleton. Una generación que nada tiene que ver con la de sus padres y que también se enfrenta a un tiempo y a un pueblo que les trata de forma diferente. Tan sólo 24 horas después del anuncio del compromiso oficial del segundo en la línea de sucesión británica, la oficina de turismo londinense ha dado cifras sobre el enlace, que ya ha sido bautizado como “la boda del siglo”.
Visit London ha estimado que la boda podría generar entre 30 y 50 millones de libras (entre 35 y 60 millones de euros) de beneficios, derivados del incremento del turismo. Según estas cifras, al medio millón de visitantes diarios que recibe la capital británica, había que sumar, no sólo los 600.000 más que supuso la boda de Carlos y Lady Di, sino también un incremento “significativo”.
Según la revista Star, los gastos de la boda rozarían los 40 millones de dólares (unos 29 millones y medio de euros), una cifra nada desdeñable que desde Clarence House no han confirmado ni desmentido aún. De todos modos, hasta pasado el enlace no podrá hacerse un balance real, aunque, como sucedió en el caso de la boda de los príncipes de Asturias, el cómputo total siempre será una aproximación.
Tras el anuncio de boda entre Felipe y Letizia, la revista Interviú realizó una estimación, partiendo de los gastos de anteriores bodas reales –como la de la infanta Elena-, que estimaba el coste en algo más de 4 millones de euros. Sin embargo, diversas asociaciones denunciaron en los días previos al enlace que el coste total habría superado los veinte millones. Esta variación se debe a que hay quien hace un cómputo global de las aproximaciones y quien deja fuera los gastos derivados del arreglo de las calles o de la colocación de paneles y vallas decoradas para ocultar obras aún por terminar.
¿Se gasta más que se ingresa?
La periodista Ana María Pascual, recogía en Interviú, entre otros gastos, los 240.000 euros para la decoración de la Almudena, 1.200.000 euros en seguridad, la misma cantidad para la retransmisión televisiva de la boda, realizada por RTVE y unos gastos de peluquería y maquillaje para cada uno de los invitados que ascendía a un total de 540.000 euros. Otras fuentes afirmaron después que la retrasmisión televisiva de la boda, por ejemplo, había costado seis millones.
En el caso del príncipe británico y su futura esposa, la publicación Star daba en mayo de este mismo año la cifra de los 40 millones, aunque sin hacer un desglose tan exhaustivo, ya que ni tan siquiera se conoce aún el lugar en el que se celebrará la boda. Sin embargo, las críticas de quienes se oponen a que el gasto sea público para un acto que consideran de carácter privado no se han hecho esperar.
Según recogía hace unas horas el diario británico Daily Mail, son muchos los que se oponen al gasto excesivo y los que se muestran cautos con las cifras que pueda arrojar la boda real en una época de crisis como la actual. Así, Emma Boom, directora de campaña de la TaxPayers' Alliance aseguraba: “Una boda real podría ser una ocasión fascinante para el público, pero Guillermo y Kate deberían evitar una boda fastuosa en los tiempos en los que existe una fuerte presión sobre las finanzas públicas”.
La mayor parte de los gastos de una boda real corren a cargo del estado, pero los beneficios repercuten casi únicamente en la ciudad de celebración. El sector turístico al completo de Londres está de enhorabuena. En Madrid, hoteles como el Palace o el Ritz albergaron a la mayor parte de los invitados al enlace entre Felipe y Letizia con precios por habitación y noche que oscilaban entre los 500 y los 3.500 euros. Pero no hay que tener un hotel o un restaurante para sacar beneficio de una boda. Agencias de viajes, tiendas de suvenires, etc… también harán el agosto.
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