Terelu Campos pierde la silla de presentadora y el poder de convocatoria

Que Terelu Campos vende parece ser una verdad universal dentro del mundo del corazón. Pero como toda verdad universal, también tiene su excepción que confirma la regla. El mismo día que las portadas de varias revistas anuncian que, como ocurrió en verano, será María Patiño, y no ella, quien sustituya a Jorge Javier durante sus vacaciones de Navidad al frente del Sálvame Deluxe, Terelu tenía programado un acto para aparecer como imagen de un producto de regeneración capilar al que los medios estaban convocados.

Y como Terelu vende, por regla general redactores, cámaras y fotógrafos se dan codazos cuando se posiciona frente al photocall. Lo dicho, por regla general. De ahí su sorpresa cuando ayudada por su representante se subió al altillo para ser fotografiada y lejos de recibir el aluvión de flashes al que está acostumbrada, apenas se escuchaban disparos de tres cámaras. Eso sí, todo muy cordial. Tres fotógrafos que hicieron su trabajo sin estrés ni empujones y una cámara de video con su redactora al lado. Allí no había nadie más. La complaciente organizadora del evento se quedó en la mano con un largo listado de medios que habían hecho oídos sordos al llamamiento.

Quizá durante su retiro voluntario de la televisión echó de menos los focos y después ha habido una sobreexposición de Terelu, oquizá, además de haber perdido la silla de presentadora, ha perdido el poder de convocatoria. Sea como fuere, ella dijo que estaba feliz y que sobre lo de María Patiño no tenía mucho que decir, además de que se alegraba por ella y que ambas mantienen una relación estupenda.