El truco de 'La ordenatriz' para hacer bien el cambio de armario

La nueva temporada de moda brinda la ocasión perfecta para renovar los looks con un colorido jersey de Zara como el de Nuria Roca o las novedades de Mango para primavera. A ello, hay que añadir las prendas que ya se encuentran en el armario esperando volver a ganar protagonismo. Así, la llegada de la primavera y la subida de las temperaturas está vinculada con el inevitable cambio de armario.

No solo para hacer hueco a lo nuevo, sino también para saber qué es lo que ya está en nuestro poder; ya que la mayoría de personas no pueden tener todo a la vista todo el año. Lo que produce que, normalmente de forma bianual, se produzca un intercambio de prendas de otoño a invierno a primavera y verano. Una tradición en muchos hogares para la que Begoña Pérez, 'La ordenatriz', cuenta con un truco esencial.

La experta en orden y limpieza, de la que ya hemos fichado otros consejos como su tip infalible para limpiar las joyas, reveló en 'Y ahora Sonsoles' un truco muy sencillo para el cambio de armario. Se trata de contar con bolsas de efecto vacío. Es decir, ese tipo de envases de plástico que crean un efecto vacío que aplasta al máximo las prendas.

Por lo que incluso piezas voluminosas, como los abrigos, pasarán a ocupar menos espacio, facilitando su almacenaje. "Su tamaño se verá reducido un 20% o un 40%". Aunque son productos que se venden, también reveló una forma casera de crear esa bolsa de vacío, con una bola de basura, un secador de pelo, unas hojas de laurel frescas para evitar las polillas y una botella de refresco de 2 litros cortada.

El consejo de 'La ordenatriz'

Lo primero es meter la prenda, por ejemplo un edredón nórdico, en la bolsa de basura, Tras esto, con una goma y la boquilla de la botella a modo de embudo, se pone al revés el secador. Lo que saca el aire del interior de la bolsa, y se crea una bolsa de efecto vacío casera. Además, 'La ordenatriz' también aconsejó en el programa de Sonsoles Ónega realizar este cambio de armario poco a poco. "Ahora nos vamos a quitar lo más gordo", opinaba.

Una serie de trucos de la experta a los que se suman los que ya reveló en su libro 'Limpieza, orden y felicidad'. Un manual donde, de cara al cambio de armario, daba mucha importancia a sacar toda la ropa, para ver qué es lo que ya tenemos: "Para ordenar, primero hay que desordenar".

A ello se sumaba el valor de limpiar también los armarios, separar las prendas por categorías y tener mucho cuidado con esos diseños de "por si acaso". Una tarea en la que se puede contar con aliados como estos accesorios de orden o cajas para optimizar este revelo de prendas.