La triple aclamación a la Reina Sofía

La Reina Sofía tuvo su gran baño de multitud la noche de este martes, cuando asistió al Teatro Real para presidir, como viene haciendo desde hace treinta años, los Premios BMW de Pintura. Acudió acompañada de la princesa Irene y además de entregar las becas y cheques a los ganadores, disfrutó del concierto a beneficio de la Fundación Mundo en Armonía,que preside su hermana Irene. La puesta en escena musical consistió en la representación de la ópera 'Carmina Burana', interpretada por la orquesta y coro de la Comunidad de Madrid y de Extremadura, la soprano Raquel Lojendo, el tenor Agustín Prunell-Friend, el barítono Toni Marsol y dirigida por Víctor Pablo Pérez.

En el caso de la Reina, los aplausos se repitieron por tres veces. Primero en la calle por parte de la gente que quería ver en vivo y en directo la llegada de personajes conocidos. Después en el interior de la sala con los 800 invitados en piey de nuevo a la salida, cuando el pueblo soberano le dedicó piropos al dar la Reina por finalizada la noche pictórica y musical.

Lo llamativo de la primera escena fue que entre el público de la calle había simpatizantes de Podemos y del PPque coincidían a la hora de dar explicaciones a Vanitatis de esta admiración por la abuela real y se resumía en una frase muy similar: “Sofía es un personaje querido porque se lo ha trabajado”. Ahí quedó el mensaje que sirve para ilustrar cómo ante determinadas circunstancias los polos opuestos ideológicos se entienden. Sigue siendo uno de los miembros de la primera familia más querido. Ahora su tarea pública se ha reducido sin que exista una explicación lógica para esa invisibilidad que tiene que ver con su apoyo público a temas relacionados con los microcréditos y otros asuntos solidarios.

A diferencia de otras ocasiones en las que el estilismo de la Reina emérita pasa desapercibido, esta vez llamó la atención. Doña Sofía eligió una túnica de gasa y terciopelo en negro y dorado de inspiración hindú que es tendencia según las expertas en moda presentes. Al finalizar la ópera, la Reina compartió cóctel en uno de los salones con los invitados, los directivos de la firma y la responsable de Comunicación Pilar García de la Puebla. Muy relajada, Doña Sofía no tuvo inconveniente en charlar con muchos de los presentes y agradecer las muestras de cariño, sobre todo las referidas al Rey Felipe cuando le comentaban el papel tan complicado que tenía que desempeñar ante la falta de acuerdo de los partidos en estos meses atrás.

Respecto a los premiados y sus obras, Doña Sofía explicó que “este añoel nivel ha sido muy alto. El jurado lo ha debido tener complicado”. También habló sobre lo emocionante que había sido la ceremonia de entrega de premios Princesa de Asturias el fin de semana anterior. En torno a las 23:30 abandonó el cócteldespidiéndose con un “hasta el año que viene” y dejando un buen recuerdo a las personas con las que estuvo departiendo. Muchas de ellas familiares de los premiados y becados.

Entre los invitados que acudieron a esta 31 edición se encontraban Miriam Ungría y su hijo Beltrán,Ana Botella con su nuera,Carolina Cerezuela y Jaume Anglada, que han hecho de su unión musical todo un éxito; Sandra Falcó,María Suelves y su marido, Pilar Medina Sidonia, Josemi Rodríguez Sieiro, Fiona Ferrer, Claudia Di Paolo, la familia Bataller,Fernando Martínez de Irujo, María Luisa Sorando y Javier Goicolea. Este año los elegidos fueron los artistas Miki Leal, que recibió los 25.000 euros del primer premio,Gloria Martín (8.000 euros); Ana Riaño (6.000 euros) y Martín Rosende, de 12 años, al talento más joven, dotado con 4.000 euros. Los treinta y un años de los premios BMW han servido para dar visibilidad a muchos artistas noveles que a lo largo del tiempo han conseguido que sus trabajos tengan repercusión en elmundo de la pintura.

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