Máxima de Holanda y Matilde de Bélgica se visten igual el mismo día y a la misma hora

Imaginad una agenda real en la que se especificara la etiqueta de los royals previamente a un evento. Sería una herramienta tremendamente útil (para ellos) pero la mar de aburrida (para nosotros), puesto que aparcaría a un lado el factor sorpresa que tanto nos atrae. De haber existido, esta hipotética herramienta les habría salvado el look a dos monarcas que coincidieron el mismo día y a la misma hora con una copia casi exacta de sus modelitos. Las ‘gemelas’ no eran otras que Máxima de Holanda y Matilde de Bélgica, protagonistas de un duelo de estilo muy de altura.

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Ambas acudieron a dos conciertos navideños en sus respectivos países natales vestidas con dos piezas idénticas. Pasamos al desglose de ambas. Matilde (45), la consorte belga, defendió un modelo bicolor en blanco y negro, de escote marcado y con un favorecedor fajín que perfilaba su figura.

Con el pelo recogido, acompañado de unas llamativas perlas que pendían de sus orejas, optó por un bolso tipo clutch con estampado de serpiente. La reina acudió con este simple y acertado look al Palacio Real de Bruselas para la tradicional función musical que tiene lugar días antes de Navidad.

De igual forma, en la ciudad de Bolduque, a apenas 150 kilómetros, y como si ambas se hubieran puesto de acuerdo, Máxima (47), esposa del rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos, se decantó por otra blusa en tono crema y de corte wrap que entrelaza el escote de forma sutil. Abajo, otro pantalón de tiro alto y pata de elefante, como Matilde, pero de distinto tejido: el de Máxima estaba confeccionado con una tela sedosa, mientras que la belga defendía la prenda con terciopelo.

Es en el asunto de los pantalones donde quizás Máxima se alce con la reñida victoria, ya que le añade un llamativo pero apropiado maxilazo que hace las delicias de bloggers e influencers esta temporada. Además de lucir unos vistosos pendientes con detalles celestes a juego con un prominente anillo. Pequeños detalles a los que la holandesa nos tiene siempre acostumbrados y que la sitúan, por mérito propio, en las listas de las mejor vestidas en Europa.

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