"Tengo neuroma de Morton y esto es lo que está viviendo Letizia": hablamos con pacientes y expertos

El 12 de octubre de 2022, Día de la Hispanidad, fue la propia reina Letizia la que desveló en un corrillo de periodistas que padece un neuroma de Morton en su pie izquierdo y metatarsalgia crónica desde hace años.

Las molestias que esta dolencia genera en la esposa de Felipe VI han quedado reflejadas esta semana con una imagen que ha llamado mucho la atención. En la cena de gala que ofrecieron los reyes Guillermo y Máxima de los Países Bajos, en la que estuvieron los Reyes de España, doña Letizia tuvo que estar sentada en el momento del besamanos.

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Núria Tiburcio (Ámsterdam)

Para saber qué molestias condicionan a la madre de la princesa Leonor y de la infanta Sofía, en Vanitatis nos hemos puesto en contacto con una experta en el neuroma de Morton y con dos personas anónimas que sufren este mismo problema de salud.

La doctora Laura Ramos Blanco es podóloga en la Clínica Footlab. Nos explica que el neuroma de Morton es "una fibrosis del nervio intermetatarsal, es un engrosamiento de los nervios pequeños que pasan entre los dedos de los pies y que dan sensibilidad a la zona distal de los dedos. Esto es una neuropatía por compresión. Se produce por múltiples causas, pero normalmente está asociado a sobrecargas metatarsales; es decir, a la hora de caminar, el pie recibe un exceso de presión o de apoyo en esa zona metatarsal y esto favorece la compresión de esta terminación nerviosa, que termina fibrosándose, esto es, engrosándose. Esto puede ser porque el pie se prone en exceso durante la dinámica, o porque exista un atrapamiento de ligamento transverso que comprima el nervio, o porque se use un calzado muy estrecho. Por supuesto, los tacones altos, como los que usa muchas veces la Reina, también influyen".

Añade que “el dolor de los pacientes con neuroma de Morton es típicamente neurológico, que se irradia hacia los dedos y que la sensación que provoca en ellos es la de llevar una piedra en el zapato o un calcetín arrugado, quemazón, dolor… que les obliga a descalzarse. El uso de zapato estrecho y tacón alto agudiza este dolor”.

A la doctora Laura Ramos Blanco le resulta "incomprensible" el tipo de zapato usado por Letizia en el besamanos teniendo este problema. "Creo que ella, como referente de moda de nuestro país, tendría la oportunidad de utilizar un zapato con la mitad de tacón, e incluso ponerlo de moda, pero sin embargo sigue utilizando esos zapatos imposibles que le obligan a permanecer sentada en un besamanos. Quizás haya algo más en su estado físico que le haya dificultado el estar de pie. Lo contrario, desde mi punto de vista, es incomprensible".

Para saber cómo influye en su día a día el neuroma de Morton en alguien que, como la Reina, sufre este problema, hemos hablado con una mujer anónima para que nos cuente su experiencia. Más comprensiva con la decisión de la reina Letizia que la doctora, nos asegura que ella misma tampoco dejó de "usar tacones, pero cada uno tendrá su umbral del dolor. Supongo que es una cuestión personal. Yo lo aguanto bien". Es cierto que el caso de esta paciente no parece tan severo como el de doña Letizia. Nos cuenta que su neuroma de Morton "se produjo por una lesión provocada por bailar con tacones durante una boda. Me dolía un poco cuando llevaba tacones, pero lo cierto es que pude hacer vida completamente normal. Yo aguanto muy bien el dolor. Me valoró un traumatólogo y me aconsejó que si aguantaba el dolor no me operara. Durante la pandemia, al quitarme los tacones tanto tiempo, se curó al cabo de unos meses de forma espontánea".

En cuanto al tratamiento para paliar las molestias generadas por el neuroma de Morton, este pasa por el uso de plantillas adaptadas y también terapias físicas. Ramos Blanco asegura que el uso de "radiofrecuancia, las ondas de choque, la laserterapia, que es lo que yo utilizo en consulta, tienen un efecto analgésico importante”.

Si esto no es suficiente, la doctora explica que existe "un tratamiento con infiltraciones de corticoides o de plasma rico en plaquetas. Y si todo esto fallara, está la tercera línea de tratamiento, que es la cirugía. Hay varias técnicas quirúrgicas en función de la localización y el tamaño de la fibrosis del nervio. Hay un mínimo de pacientes que requieren este tipo de tratamiento".

De momento, nada le ha funcionado a la Reina para hacer desaparecer su neuroma de Morton y desconocemos si en un futuro se someterá a este tipo de intervención o si ya no tiene solución.

Para comparar el caso de mujeres como Letizia, o como la paciente anónima que hemos consultado, con el de los hombres también hemos querido conocer la experiencia vital de un paciente masculino con neuroma de Morton. Nos explica la doctora Ramos Blanco que en el caso de hombres, se da con más frecuencia en varones de mediana y avanzada edad que realizan deporte, sobre todo de impacto.

Nuestro paciente consultado, de 72 años, nos cuenta que en su caso "no se sabe la causa" de su desarrollo de un neuroma de Morton. Tiene "una dureza donde termina la planta del pie y empieza el dedo" y asegura que "aunque me han inyectado tres veces", no ha desaparecido.

Este problema le provoca dolor al caminar: "Con calzado deportivo mullido y de buena calidad, puedo caminar dos horas, pero luego tengo que parar. Con calzado más estrecho y más duro no podría caminar tanto tiempo seguido".