Así ha recordado en una entrevista Máxima de Holanda la muerte de su hermana Inés, siete años después de su suicidio

No es nada nuevo que la salud mental se encuentra, desde hace unos años, en la hoja de ruta del trabajo social de las casas reales europeas, especialmente de reinas y princesas. Incluso hay algunas de ellas que han hablado abiertamente de sus problemas, como Victoria de Suecia, Mette-Marit de Noruega o Masako de Japón. Ahora, ha sido Máxima de Holanda la que ha recordado en una entrevista de la muerte de su hermana Inés, cuando se van a cumplir siete años de su suicidio.

La reina de los Países Bajos ha posado para la revista neerlandesa 'Linda', en la que habla abiertamente del fallecimiento de su hermana pequeña, en junio de 2018. Ella misma había decidido quitarse la vida, después de que la inestabilidad de su salud mental la acompañara gran parte de su vida, con diferentes problemas de depresión, trastornos de alimentación y algunos ingresos en centros especializados.

Lejos de ocultar que había sido un suicidio o esquivar el tema, la propia Máxima de Holanda, siendo ya reina de Países Bajos, decidió hacer una improvisada comparecencia ante los medios de comunicación cuando retomó su agenda oficial: "Mi querida y talentosa hermana pequeña, Inés, estaba enferma. No podía encontrar alegría y no pudo curarse. Nuestro único consuelo es que ahora, finalmente, ha encontrado la paz", afirmó.

Siete años después, Máxima ha vuelto a recordar ese doloroso momento para poner en valor, de nuevo, la salud mental. La argentina ha abierto de nuevo las puertas de Huis ten Bosch, como ya hiciera con motivo de su 50º cumpleaños a un medio de comunicación, rememorando una escena de su vida tan dolorosa como aquella.

Durante la entrevista, la argentina habla con el periodista, Sam Hoevenaar, de la fundación MIND Us, que trabaja por la salud mental de los jóvenes y que ella misma puso en marcha en 2022, impulsada por ese doloroso acontecimiento que rompió a su familia en 2018, el fallecimiento de su hermana pequeña.

El objetivo de la fundación es romper el tabú que rodea a los problemas de salud mental entre los jóvenes, incluida la soledad, con diferentes centros sociales en varias ciudades del país: "Escucha, hay más personas que se sienten como tú. ¿Cómo te enseñamos a acercarte a esas personas y preguntarles cómo estás?". Los jóvenes me dijeron que este tipo de lugares les hacen sentir mejor consigo mismos”.

Y precisamente, el suicidio de su hermana pequeña supuso para la reina Máxima un antes y un después en la forma, no solo de ver y tratar la salud mental, sino de abordar esos problemas abiertamente y poder comunicarlos: "Cuando mi hermana falleció, decidí compartir con sinceridad que ella misma se quitó la vida tras años de problemas mentales. Compartir mi historia personal me ha conmovido mucho", cuenta.

"He recibido miles de cartas, flores, tarjetas, de todo. Me escribieron: "Mi hermano también se suicidó, pero nunca me atreví a decirlo en el trabajo", cosas así. Las cartas que recibí me han apoyado enormemente. Porque supe que no estaba sola. Siempre digo: todos tenemos momentos tristes y es lícito estar tristes. Cuando te sientes solo o deprimido, a veces sientes que eres el único en el mundo. Pero no es así", continúa.

No es nada habitual que la reina Máxima recuerde en público aquel trágico acontecimiento, tras el que la familia Zorreguieta se unió aún más. Junto a su marido y sus tres hijas, se trasladó a Argentina para despedir a su hermana pequeña y, principalmente, apoyar a su madre, cuya mano no han soltado ni ella ni ninguno de sus hermanos, siempre una piña a pesar de la distancia por la que están separados, al vivir cada uno en un país diferente.