Muere Tina Turner a los 83 años: una vida marcada por la pobreza y la muerte de sus dos hijos

Tina Turner ha fallecido hoy a los 83 años y ha sido su representante el que ha comunicado la noticia mediante una declaración a los medios Sky News y ‘Telegraph’: "Tina Turner, la Reina del Rock n’ Roll ha fallecido hoy en paz a la edad de 83 años tras una larga enfermedad en su casa de Küsnacht, cerca de Zúrich, Suiza".

Se retiró de la música en 2009, a los 70 años, dejando atrás un legado de 50 años de música rock y soul, con mucho prestigio y coronándose como una reina en la música de este género.

Nacida bajo el nombre de Annie Mae Bullock, la cantante conquistó escenarios por todo el mundo durante décadas, abriéndose paso en un mundo que hasta entonces había estado dominado principalmente por hombres.

Sin embargo, a pesar de que conoció el éxito en la música, su vida también estuvo muy marcada por las tragedias. A finales del año pasado, compartía por Instagram la noticia de la muerte de su segundo hijo, Ronnie, a los 62 años de edad. Según informó el canal de noticias 'TMZ', Ronnie Turner falleció después de "tener dificultades para respirar" y de que los vecinos lo encontraran “inconsciente" fuera de su casa. Los testigos presenciales avisaron a los servicios médicos, pero nada se pudo hacer para salvarle la vida.

Por desgracia, esta no fue la primera vez que la cantante sufría la pérdida de un hijo. En 2018, mientras se encontraba en el desfile que la firma de Giorgio Armani ofrecía en la Semana de la Moda de París, recibió la noticia de que su hijo Craig Raymond Turner había sido declarado muerto en su residencia de Studio City, a los 59 años. El subdirector de la oficina, que anunció el fallecimiento, aseguró que el motivo de la muerte había sido el suicidio y que habían encontrado una herida de bala en su cuerpo.

Contaba con una fortuna de 227 millones de dólares, con la que se retiró para llevar una vida tranquila a Suiza, lejos de la vida social y mediática. "Aquí me siento como en casa. Si estoy en el lago de Zúrich, en la casa que tengo, me siento serena. Realmente tengo todo aquí", afirmó en una entrevista hace unos años.

Una fortuna que consiguió trabajando muy duro día tras día, pues ni siquiera en sus inicios su vida fue sencilla. Admitió en varias entrevistas que su infancia fue sumamente difícil, pues existía violencia dentro de la familia. Con once años, su madre dejó a su padre, desapareciendo sin decirles nada a sus hijos, para luego divorciarse de un matrimonio abusivo. En sus memorias, la cantante admitió no haber sentido nunca cariño por parte de su madre, llegando a afirmar que no la quería.

Una situación que no mejoró en la adolescencia, pues con 17 años se casó con Ike Turner, una persona violenta y adicto a las drogas, que la maltrató durante años. Sin embargo, en 1985 conoció a un ejecutivo de EMI, su casa de discos en Europa, llamado Erwin Bach, de quien se enamoró a primera vista y con quien acabó casándose en 2013.

Hoy toca despedirse de una artista con una de las vidas más tenaces del mundo de la música, que revolucionó el rock como nadie, combinándolo con otros estilos como el soul. Deja tras de sí un enorme legado compuesto de 22 discos, en los que se puede apreciar el luchador espíritu de la cantante y la vida, no siempre fácil, que le tocó vivir.