Carlota Casiraghi, en el desfile de Chanel: manicura fantasía, un icónico bolso y un fondo de armario

La hija de Carolina de Mónaco continúa su idilio con la eterna firma francesa. Y una vez más, Carlota Casiraghi ha ejercido de perfecta embajadora de Chanel, esta vez en la presentación de la colección crucero en Marsella, con una manicura fantasía, un icónico bolso y una prenda perfecta del fondo de armario.

Pero no ha sido la única. El desfile sobre la pasarela ha venido acompañado de otro desfile, el de estrellas, principalmente de origen francés, que no han dudado en viajar hasta la costa para disfrutar de este show, con la obra de Le Corbusier la Cité Radieuse como escenario.

Entre ellas, además de la sobrina del príncipe Alberto de Mónaco, la actriz Lily-Rose Depp, que ha dado todo el protagonismo a su falda, con detalles de flores con volumen, y su bolso, en color fucsia. La hija de Vanessa Paradis y Johnny Depp presumió, además de abdominales, con un top corto de media manga en color negro.

El negro fue precisamente el color elegido por Carlota Casirahi, una opción no demasiado habitual cuando se sienta en el front row como embajadora de Chanel. Este jueves hemos visto un look muy parecido al que llevó en la Semana de la Moda de París, dejando a un lado los coloridos dos piezas confeccionados en tweed y apostando por chaqueta y pantalón combinados con un top blanco de algodón, una de esas prendas que componen un perfecto fondo de armario.

Su conjunto, en punto tubular en color negro, presenta seis botones con reminiscencias marineras muy adecuada para el entorno, ya que Marsella ya es uno de los puertos más importantes de Francia. Además, Coco era fan de la costa azul y este diseño es un homenaje a la pasión que sentía la diseñadora por los marineros. No podemos dejar de recordar que fue la diseñadora francesa quien convirtió la camiseta de rayas en una prenda de moda.

La nota de color la ha puesto, por un lado, con su bolso, uno de los icónicos acolchados de la firma, con el logo bien visible en la parte frontal y cadena dorada. Y por otro, con su manicura, de un vibrante azul metalizado. Estas llamativas uñas azules nacaradas nos hablan de la que será seguro una de las tendencias futuras en cuestión de manicura: una apuesta curiosa, dado que Carlota siempre se mueve entre básicos.

Su moño despeinado y la casi ausencia de joyas, así como un maquillaje absolutamente natural con solo un ligero toque de color en los labios, han demostrado cómo la hija de Carolina de Mónaco es capaz de llevar esta firma de alta costura a su terreno, siempre dándole un toque personal y dependiendo del contexto.

Carlota posaba antes de sentarse en el front row con dos viejos amigos, el cantante Sébastien Tellier y su esposa, Amandine de la Richardière. De la mano del intérprete, Carlota Casiraghi se atrevió a salir de la zona de confort hace tres años, demostrando que por Chanel es capaz de cualquier cosa. De forma inesperada, ejerció de acompañante del cantante en un vídeo musical de la firma, sorprendiendo a todos con su voz.

La aparición de este jueves en Marsella ha sido mucho menos sorprendente y más acorde con sus habituales apariciones, en las que sirve como uno de los grandes reclamos de la casa francesa solo son sentarse en el front row.

La monegasca inició oficialmente su relación con Chanel en 2021, cuando la casa de moda anunció en un comunicado que la princesa se convertiría en embajadora y portavoz de la maison. Desde entonces, además de asistir a sus desfiles y lucir sus prendas, ha promovido y fomentado 'Los Encuentros Literarios de la Rue Cambon', aunando literatura, filosofía y moda, tres de sus grandes pasiones.

Eso sí, la relación ya venía de lejos, puesto que su madre, Carolina de Mónaco, es la perfecta encarnación de los valores de la firma y su amistad con Karl Lagerfeld, director creativo en los últimos años, fue muy estrecha hasta el fallecimiento del alemán.