Viaja al estilo hipster: seis hoteles donde te sentirás un gafapasta

Si eres bohemio, te gusta que las cosas tengan un aire retro, amas lo vintage y no te entran ganas de volar a Pernambuco cada vez que oyes la palabra hipster, en estos hoteles te sentirás como en casao mejor. Son muy estéticos, les da por hacer filosofía de la vida, están entregados en cuerpo y alma al diseño y pecan de urbanitas como los que más. Su pecadoes abrazaresa religión de muchos libros que es el cosmopolitismo. Estas vacaciones son con chic y un sombrero. Échale cuento a tu propio viaje y mira qué belloes todo a tu alrededor. Esta ruta empieza en Nueva York. Era inevitable.

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THE NOLITAN: SOFISTICACIÓN, MUCHO MANHATTAN,LIBROSY UN MONOPATÍN

Hotel con libros y habitaciones con vistas al sur de Manhattan, en estas calles que tanto se parecen a un tango, las del barrio de Nolita (North of Little Italy). El Nolitan es sofisticado de sobra como para hacernos olvidar ese minimalismo de moda que nos dejó tan desnudos tiempo atrás. Por supuesto, tiene bicicletas para alquilar y hasta monopatines. Adoran a las mascotas, que tratan como a uno más. Y su cantina, de ingredientes locales y sostenibles, es ya desde el nombre ‘parisienne’: aquí el culto es para la cocina francesa. No falta la azotea, donde puedes proclamarte, y con razón, el amo del universo. Afortunados los hipster, porque habitan su propio paraíso. Dónde: 30 Kenmare Street. Nueva York.

CHIC&BASIC: UN SEAT 600 PARA VIAJAR A LA BARCELONA DE LOS 60

Un 600 verde (el mítico Seat) nada más entrar, maletas agolpadas con ese aire retro ultramarino que tanto recuerdaal baúl de la Piquer (y otras y otros folclóricos, y no tanto) y arriesgados colores aquí y allá puestos sin miedo hacen a este hotel de las Ramblas. No es sin fundamento, al revés: nada menos que "Barcelona and the sixties". La inspiración con nombre nostálgico de grupo yeyé viene efectivamente de la ciudad en los sesenta: hay exposiciones fotográficas en las puertas de sus 85 habitaciones. El Chic&Basic te ofrece descanso para las noches desenfrenadas barcelonesas y lo contrario: sesiones con dj miércoles, viernes y domingo. Las bicicletas estánsiempre esperándote. Dónde: Pasaje Gutenberg, 7. Barcelona.

ABCYou: CERÁMICA VALENCIANA, DISEÑO NÓRDICO Y UN JARDÍN INTERIOR

Es un bed&breakfast con todas las de la ley y con la ventaja estética de habitar un edificio histórico. La pareja holandesa que lo regenta se ha empeñado en mezclar los tradicionales mosaicos de cerámica valenciana con el diseño nórdico y mucho color, uno para cada habitación, en una batalla ganada a la uniformidad. El ABCYougoza hasta de un pequeño jardín interior, con sus flores (ni sombra de autoayuda). La luz entra sin pedir permiso (estamos en Valencia), hay baño en todas las habitaciones (lujo para un B&B), el wifi gratuito que ya no puede faltar y en la coqueta cafetería, los igualmente esperables zumo natural y pastelería casera. Dónde: C/Taquígrafo Marti, 10. Valencia.

25 HOURS BIKINI: VISTAS AL ZOO, UN HORNO PARA EL PAN Y BICIS A GOGÓ

Así es Berlín, así es este ’25 horas’. Cosmopolita y salvaje. No es que digamos que esto es la jungla, por la aventura trepidante, es que se autodefine así: poblado de animales, vegetación, materiales naturales y el colorido que requiere la ocasión. Si hasta las habitaciones tienen vistas al zoo. En el 25 Hours Bikini, hay un bar-restaurante en la azotea con panorámica de 360º grados sobre la ciudad, un Monkey Bar para descansar de tanta experiencia, una ‘isla Bikini’ con dj, una sauna también con vistas y un Mini (el presumido coche) para alquilar. Por tener, tiene horno de leña para cocer el pan y bicicletas a gogó. Dónde: Budapester Strasse 40. Berlín.

CITY CIRCUS: UN HOSTAL PARA ACRÓBATAS CON SESIONES DE CINE EN EL SALÓN

Había una vez un circo que era un hostal (un hostel) y que alegraba siempre el corazón, o lo intentaba (¡Ay, los payasos!). Estaba (está) en el barrio ateniense de Psiri, de amplia biografía nocturna y vanguardista. Es el City Circus, hecho a la medidasin medida de los viajeros inquietos y acróbatas (“aquellos que viven al límite”, literalmente), los que habitan lo surreal y se aventuran en las búsquedas con libertad. Esto llevado a la hostelería se traduce en pinturas al fresco para los techos, muebles vintage, sagrado reciclaje, diseño moderno, balcones de forja, azulejos barrocos y street art salido de la chistera de los artistas locales. Ahora no te extrañará que te digamos que hay sesiones de cine en el salón, tours en bici por la ciudad, paseos en barco por la costa ática, fiestas en su azotea y un excitante etcétera. Neoclasicismo griego. Dónde: 16 Sarri Str. Atenas.

1888: EL PRIMER 'HOTEL INSTAGRAM' ES DECIMONÓNICO

Aquí, en las antípodas, se alza el que se hace llamar el primer ‘hotel Instagram’, tal cual. Y no es un farol: este hotel ultramoderno que no olvida el sabor del viejo Sidney (ahí está su estructura antigua, sus techos altísimos, sus vigas originales, las ventanas de época y su fecha de construcción, 1888) ha dispuesto para sus huéspedes un selfie space para que los susodichos se hagan su foto, que va directamente al panel digital que se encuentra junto a larecepción. Organiza un Insta Walk, un paseo de 45 minutos por los alrededores consagrado a hacer fotos, y otras travesuras de este calado. Además, te darán un pase para que te entregues al fitness o la natación en el cercano Centro Acuático Ian Thorpe. Si hablamos de comer, todo es ecológico, orgánico, local y sostenible. Dónde: 139 Murray St, Pyrmont NSW 2000, Sidney.