Olvídate del contouring de Kim Kardashian, lo último en maquillaje es el strobing

¿Ahora que por fin le hemos cogido el truco a esto del contouring vamos a sustituirlo por otra cosa? ¿En serio? Pues parece que sí, porque el strobing viene pisando fuerte, y se da el caso de que es de lo más favorecedor, necesitas menos productos para realizarlo y es más rápido y sencillo. Pero¿qué es el strobing?

Como ya hemos explicado en otros artículos, el contouring es un técnica que permite redefinir las facciones del rostro, trabajando con productos más claros y oscuros que el tono natural de la piel para crear luces y sombras, y así conseguir que determinadas zonas ganen volumen y resalten. El strobing, por su parte, deja a un lado las sombras y se centra exclusivamente en la luz, siendo su finalidad el resaltar la luminosidad natural del rostro, apostando por un efecto más juvenil y menos recargado, además de utilizar menos producto y ser más rápido de hacer, por lo que podrás incorporarlo a tu rutina de belleza matinal sin necesidad de levantarte media hora antes.

Hidratante Cellular Swis Ice Crystal Oil de La Prairie. Iluminador Copacabana de Nars. Iluminador High Beam de Benefit.

Para practicar el strobing no hay que comerse mucho la cabeza porque se siguen las mismas reglas que en el contouring: ver los lugares en los que incide la luz de forma natural en el rostro y aplicar ahí el producto iluminador. Pero, a diferencia del contouring, con esta técnica vas a conseguir un aspecto de piel mucho más jugosa y joven, sin necesidad de superponer capas y capas de maquillaje que no la dejan respirar. Por ello, los iluminadores serán básicos, pero también lo será tu hidratante preferida que, como afirma Maite Tuset, senior artist de MAC, “aplicada en las zonas altas del rostro te aportará un reflejo de la luz dando sensación de piel jugosa e hidratada, aportará luminosidad sin pigmentos iridiscentes”.

Base Iluminadora Éclat Minute de Clarins. Crema Iluminadora Strobe Cream de MAC. Bálsamo Iluminador Extra de Bobbi Brown.

Pero cuidado, porque la palabra 'iluminar'en este contexto no incluye ni purpurinasni bling-bling; la naturalidad es la clave, así que huye de los productos con acabado metálico, como polvos que tienen ligeras trazas de purpurina, y apuesta por texturas cremosas que aportan ese glow que estamos buscando de una forma más natural.

Iluminador Touch Éclat, de YSL; fluido embellecedor Fluid Sheer, de Giorgio Armani; iluminador Éclat Lumière, de Chanel.

LISTA EN SOLO DOS PASOS:

• Comienza dejando a un lado tu base de maquillaje y apuesta por una hidratante con un ligero toque de color. Aplícala por todo el rostro.

• Con un iluminador de acabado cremoso, esculpe el rostro aplicándolo en las mejillas (más concretamente en la zona que se eleva cuando sonríes), el puente de la nariz y el arco de cupido. También puedes añadir ligeros toques de luz en el centro de la frente, debajo del arco de la ceja y en la zona interna del ojo.