De los Javis a Palomo Spain: el maquillaje masculino se cuela en la alfombra roja

Después de aquel tímido intento de las manicuras masculinas para luchar contra el maltrato infantil que lucieron Brad Pitt o los hermanos Hemsworth y que consistía en pintarse tan solo una uña a modo de protesta, parecía que el avance del maquillaje masculino era muy lento. Hasta que las principales firmas de belleza lanzaron sus maquillajes masculinos. Dior, Chanel o Givenchy rompían con lo establecido y elaboraban fórmulas que se adaptaran a las necesidades de la piel y gusto de los hombres.

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Sin embargo nunca creímos que veríamos desfilar por la alfombra roja de los Goya a hombres maquillados -más allá de Miguel Bosé en los 80-, hasta que el diseñador Palomo Spain llegaba a la gala del brazo de Raquel Sánchez Silva luciendo un ultra discreto maquillaje de ojos. Un ligero toque de color marrón en párpado superior e inferior oscurecían su mirada y haciéndola más dramática.

“Hoy creo que el protagonismo debe ser para los actores” decía a su llegada a la alfombra roja para justificar su look sobrio y todo al negro. Pero además de su broche dorado y rematado con perlas, su maquillaje, un smokey eye muy ligero, demostraba que la coquetería en una noche tan especial no podía faltar en su imagen.

Un caso algo diferente, aunque sus maquillajes eran similares, era el de los javis. Javier Ambrossi y Javier Calvo, pareja y dúo creativo, aparecían en Málaga con piel, ojos e incluso labios maquillados.

Por un lado Javier Calvo optaba por enmarcar ligeramente su mirada con sombras negras, muy difuminadas que, junto a sus labios en tono cereza y desdibujados con ayuda de los dedos, creaban un maquillaje años 20 de efecto deslavado.

Javier Ambrossi arriesgaba mucho más con su maquillaje. Un ahumado en tonos rojizos, máxima tendencia de los últimos años, en el que tampoco faltaba un delineado grueso y sin rematar, elaborado con un lápiz khol. La sombra rojiza, actuaba como color complementario de sus ojos, logrando un maquillaje muy cálido pero vampírico y muy dramático. A diferencia de Calvo, Ambrossi prefirió dejar sus labios desnudos.

Después de ver estas tres opciones de maquillaje masculino tan firmes y arriesgadas, no queda ningún tipo de duda de que sentarán precedente y de que cada vez serán más los hombres que decidan salir a la calle con un poquito más de color.